Conversación de Bob Avakian con unos camaradas sobre epistemología:
Sobre conocer, y cambiar, el mundo

Obrero Revolucionario #1262, 19 de deciembre, 2004, posted at rwor.org

"La verdad es buena para el proletariado;
toda verdad nos ayuda a llegar al comunismo."

Bob Avakian

Nota de la redacción: El siguiente artículo tiene como fuente una conversación de Bob Avakian con unos camaradas sobre el tema de la epistemología. La epistemología se refiere a la teoría del conocimiento: cómo se adquieren conocimientos, la naturaleza de la verdad y cómo conocerla. Hemos procurado ser fieles a la conversación. Ni el presidente Avakian ni los otros camaradas prepararon sus intervenciones de antemano; fueron comentarios espontáneos, y el artículo se basa en apuntes (no textuales), revisados y levemente corregidos por uno de los participantes. No hemos incluido todos los comentarios de los camaradas; pero como algunos responden a las intervenciones del presidente Avakian o amplían algún comentario, nos pareció importante incluirlos. Hemos editado el texto e insertado las notas (entre corchetes en el texto) y las notas de pie de página.
Próximamente publicaremos otros comentarios del presidente Avakian sobre epistemología.

BA: Ciertamente, la orientación hacia los intelectuales concentra muchas cuestiones. Desde que escribí Conquistar el mundo (CEM)1, he venido planteando una ruptura epistemológica con mucha de la historia del movimiento comunista internacional, y también con China y la Gran Revolución Cultural Proletaria (GRCP). En la GRCP en una circular importante del Partido Comunista de China plantearon que existe la verdad proletaria y la verdad burguesa.2 En polémicas sobre el golpe en China, lo repetimos sin analizarlo críticamente. Posteriormente, hicimos una autocrítica. La ruptura empezó con CEM. Con esa obra hicimos una ruptura epistemológica: tenemos que basarnos en la verdad sin ocultar cosas, etc.; fue una orientación de interrogar toda nuestra historia. Para algunos fue un soplo de aire fresco, y otros la odiaron y dijeron que redujo la historia del movimiento comunista internacional y nuestra bandera a "jirones", lo cual no fue para nada cierto. Un fin al horror (End to the Horror)3 señala que la verdad de clase no existe pero hay una metodología que permite conocer la verdad más cabalmente, y las cartas abiertas a Carl Sagan y Stephen Jay Gould (e Isaac Asimov) exploran el tema más a fondo.4 Por otro lado, está el argumento de John Stuart Mill sobre la contienda de ideas, con lo cual he manifestado acuerdo en algunos aspectos, de que es importante oír argumentos de los defensores apasionados de una idea y no solamente de sus oponentes. No digo que Mao no tenía este tipo de orientación; sin embargo, lo que vengo planteando representa una ruptura epistemológica. Si bien muchos estaban muy receptivos a CEM en cierto sentido, eso se dividió en dos, y la división se acentuó con el tiempo. Yo he ido siguiendo el camino que CEM abrió; no tenía un método a priori [a priori se refiere a sacar conclusiones antes de investigar]. Los planteamientos de CEM tienen cierta lógica; llevan a un lugar definido y si uno se opone a eso, va a otro lugar. Muchos se han aferrado al viejo modo de abordar esas cuestiones del movimiento comunista, que se concentra en el concepto de verdad de clase, y eso sigue siendo un problema muy real.

La orientación hacia los intelectuales está relacionada con la cuestión filosófica de qué nos proponemos y qué representa el proletariado. ¿Qué es la "posición parecida a dios que tiene el proletariado", que menciono en "Grandes objetivos y gran estrategia"? Por una parte es como si uno estuviera en una colina observando el gran desfile del desarrollo de la humanidad. Unas partes apenas se ven en penumbras, otras se ven más claramente; en medio de esa amplia perspectiva histórica y en cierto momento, surge de ese conjunto de relaciones sociales el grupo llamado el proletariado que puede llevar todo eso a un lugar muy definido, a un mundo totalmente distinto. Pero no debemos reificar al proletariado, o sea, convertirlo en una cosa u objeto. Claro, consta de personas, pero el chiste no son los proletarios individuales sino el proletariado como clase, su posición en la sociedad y sus intereses fundamentales como clase. En esa amplia perspectiva histórica, también se ve el papel de los intelectuales. Básicamente, ¿dan lata? Algunos lo ven así y ha sido una tendencia, un problema muy concreto, en la historia de nuestro movimiento.

Pero desde esa amplia perspectiva histórica, lo vemos de otra manera. Por ejemplo, el físico Brian Greene populariza asuntos de física y aborda una gran contradicción que los físicos todavía no han resuelto entre la teoría de la relatividad y la mecánica cuántica. O sea, se les presenta el reto de hacer una síntesis más elevada. ¿Cómo lo vemos? Si no tiene uso inmediato, ¿es una gran pérdida de tiempo? ¡Para nada! Claro, debemos desenvolver una lucha con los expertos de física y otras ramas, pero de una manera correcta. Trabajando correctamente con ellos, debatiríamos todo tipo de cuestiones y también cuestiones de su trabajo, pero antes que nada nos interesaríamos por el trabajo que están haciendo y las cuestiones que están explorando. Lo haríamos de otra manera, y no como muchas veces se ha hecho en la historia de nuestro movimiento. Para nuestras metas, o lo que deben ser nuestras metas, ¿es importante que los físicos conozcan el mundo más a fondo? ¡Claro! ¿Es necesario que tengan un espacio, que "se les aflojen las riendas"? ¡Cómo no! ¿Debemos luchar con ellos? ¡Claro que sí! ¿Es necesario que vayan a las masas y aprendan de ellas? ¡Sí! Pero es muy cierto lo que dice Bill Martin en la introducción al libro que saldrá próximamente (una conversación entre él y yo): por un lado, es problemático que los intelectuales se aíslen en torres de marfil pero, por el otro, necesitan definitivamente un ambiente y un espacio adecuado para hacer su trabajo.6

Claro, tenemos que bajarnos de la montaña y conectarnos con las masas, pero tenemos que subirla también, porque sí no, no vamos a hacer nada bueno. Algunos de los errores de Stalin eran suyos, producto en gran parte de sus problemas metodológicos, y algunos heredó de Lenin. (Abordé algunos aspectos del tema en CEM ).

Por lo general, ese modo de ver a los intelectuales [una visión estrecha] ha sido la posición convencional de nuestro movimiento, e incluso de la Gran Revolución Cultural Proletaria. Pero desde hace un par de décadas he estado luchando por llevar las cosas por otro camino. ¿Reconoces que es así o lo rechazas y buscas otra cosa? XXX [un camarada dirigente del PCR] me dijo que es muy importante que haga lo que hago, y le contesté que es de igual o más importancia que ¡tú lo hagas también! Necesitamos un núcleo sólido unido por la línea correcta; si no lo tenemos, no va a ser bueno que se tome mucha iniciativa. Pero si lo tenemos, podemos desatar muchas cosas, de diversas expresiones y caminos, incluso muy raros, pero habrá lucha y avanzaremos.

¿Cómo abarcar la historia de la humanidad? Por ejemplo, el fenómeno de los indígenas que se definen por su religión. Es crucial a su identidad. Difícil... pero ni chance tenemos sin la metodología y concepción del mundo que vengo planteando. Sin ella, o de plano vamos a ir a la zaga como borregos o lo reprimimos brutalmente cuando estorba. Mao captó esto en algunos aspectos. Criticó duramente a la Unión Soviética por obligar a los musulmanes a criar cerdos. Tenemos que rebasar lo que hizo Mao. Mao murió hace 30 años y Lenin hace 80; si no los rebasamos, ¿qué estamos haciendo?

CEM representa una ruptura epistemológica inicial. El chiste es cambiar el mundo y para eso tenemos que captar la realidad. Darwin y Newton descubrieron aspectos de la realidad. Posteriormente, se demostró que tuvieron ciertas limitaciones y que se equivocaron en algunos aspectos, sobre todo en el caso de Newton. Básicamente, Darwin tenía razón, y es muy importante defenderlo, especialmente ante los ataques de los fundamentalistas religiosos. Pero desde la época de Darwin hemos profundizado el conocimiento de la evolución. Claro, no queremos que los intelectuales se aíslen en torres de marfil, pero lo que dice Bill Martin [que para trabajar necesitan un ambiente y un espacio adecuado], digo, tenemos que resolver esa contradicción. Debemos plantearla a las masas. Si tenemos el poder y dirigimos la sociedad socialista y no la resolvemos correctamente, nos tumbarán o se harán a un lado cuando invada un ejército más fuerte. Ahí está el caso de Saddam Hussein: era un gran opresor y, aunque no lo derrotaron, tampoco lo defendieron ante otro opresor más fuerte, la invasión de los imperialistas yanquis. Lo mismo nos pasará si no resolvemos los problemas concretos de la sociedad socialista, los problemas cotidianos de las masas. Por eso, tenemos que dirigir a las masas y plantearles las contradicciones a ellas e incluso a las capas intermedias y estimular lucha de ideas. Decirles: así es cómo lo estamos manejando; ¿tienen críticas? No debemos simplemente despachar al ejército y suprimir cosas. No soy idealista; a veces necesitamos el ejército, pero no debe ser el primer recurso. Hay que plantear las contradicciones y preguntar: ¿qué opinan?; ¿cómo debemos resolverlas? Por ejemplo, hay gente que no tiene servicios de salud; ¿cómo lo resolvemos sin reproducir las mismas grandes desigualdades de una sociedad en que unos cuantos trabajan en las ciencias? Pero tampoco queremos impedir el trabajo de los científicos. Otro ejemplo: ¿cómo lidiamos con el cerco imperialista del país socialista? Aquí está la contradicción; vamos a explorarla y debatirla. ¿Cómo lidiamos con esto?

No es que Mao no tuviera aspectos de esta orientación, pero lo que estoy planteando es un poco distinto. Tengamos confianza en las masas; si les planteamos los problemas, podemos luchar con ellas, aprender de ellas, dirigirlas y ganar a un gran sector. No quiero estar solo en este camino; no tiene caso, pues no llevará las cosas adonde tienen que ir. Quiero que otros me acompañen y me ayuden a hacer el trabajo, y hagan ese trabajo también. Muchos aquí y muchos militantes del partido y otros pueden aportar. Es un proceso muy bueno. En respuesta a la charla "Las elecciones, democracia y dictadura, resistencia y revolución",7 un profesor, refiriéndose a mis críticas de Stalin y su metodología y la necesidad de hacer las cosas mejor, dijo que no habría sido tan grave si los camaradas de Stalin y otros lo hubieran cuestionado. Agregó: "Dime concretamente: ¿cómo podrán ustedes hacer las cosas mejor que lo que hicieron en la Unión Soviética en los 1920 y 1930, y en China en la GRCP? Yo veo el problema así", elaboró, "estando en el poder, habrá gente que se opondrá y de pronto ustedes despacharán al ejército para reprimirla". Es algo muy importante, una contradicción muy concreta, y necesitamos intercambiar ideas al respecto con gente como ese profesor y otros. Podemos encontrar una solución buena a la contradicción, pero no será fácil; manejarla correctamente requerirá mucho trabajo y lucha, a lo largo del proceso.

He aquí un problema muy grande: cuando llegue el momento, cuando surja una situación revolucionaria, nuestra fuerza material tiene que confrontar y derrotar a los imperialistas. Tiene que ser la fuerza dirigente para que consigamos el núcleo sólido que permita abrir la sociedad a las masas. Si dejamos que se decida la cuestión elemental de establecer el socialismo por mayoría del voto, todo se irá a pique. Tenemos que movilizar una fuerza material que derrote al enemigo y marque la pauta de la nueva sociedad. Entonces tenemos que hacer muchas cosas para "abrir la sociedad" a las masas y dirigirlas de acuerdo a eso. Es precisamente lo que buscamos con el proceso dinámico del núcleo sólido con elasticidad. [Se refiere al concepto y método del "núcleo sólido con mucha elasticidad" que el presidente Avakian ha destacado, un principio que urge aplicar tanto en la sociedad socialista como en el proceso revolucionario encaminado a la meta final de un mundo comunista. Véase la charla del presidente Avakian: "Dictadura y democracia,y la transición socialista al comunismo". El texto completo está disponible en la internet en rwor.org. Se publicó en el Obrero Revolucionario Nos. 1250-52, 1254-55, 1257-58 y 1260].

La cuestión "del núcleo sólido con mucha elasticidad" no se resuelve de una vez por todas; cuanto más tengamos el núcleo sólido en cada situación, en cada plano, tanta más elasticidad debemos tener. No podemos tener un núcleo sólido sin elasticidad ni debe ser demasiado fuerte, como un agujero negro que se traga la luz.

Es difícil manejar correctamente los dos aspectos. Veamos el aspecto de la fuerza material para derrotar al enemigo y marcar la pauta. Es parecido a la película Remember the Titans sobre la integración racial de una prepa de Virginia y su equipo de fútbol americano. Tomaron esa decisión, contrataron a un entrenador negro y lucharon por cumplir sus objetivos. Eso fue mejor que preguntarles a los blancos si estaban a favor de la integración racial. Muchos habrían dicho que ¡no! Es mejor cuando tenemos la posibilidad de establecer ciertas normas básicas. "No, en la sociedad socialista, no se enseña la religión en las escuelas. Si quieren, pueden inculcarla en casa, pero los niños van a asistir a la escuela pública y conocer la ciencia, la historia y cómo abordar correctamente la realidad". ¿Y los católicos que no pueden estar contentos sin el papa? No hay catolicismo sin el papa. Es una gran contradicción. Estas contradicciones son difíciles y ni chance tendremos si no estamos en el camino que vengo señalando. Dije francamente en la charla sobre la dictadura del proletariado8 que en algunos aspectos estoy planteando contradicciones y ofreciendo un método sin dar una respuesta completa. Pero estoy convencido de que esta orientación es la correcta porque nos lleva adonde queremos ir y concuerda con nuestra meta final del comunismo.

En Anti-Duhring Engels dice sin pelos en la lengua que a los conocimientos de entonces los van a suplantar otros. Es la orientación y método correcto; es dialéctico y materialista, y no religioso. Las teorías de Newton son ciertas en un plano, pero hay una realidad más grande que no captó. Esto se aplica a nosotros: hay muchas cosas que no captamos; en el futuro se descubrirán muchas cosas que suplantarán y rebasarán las verdades que tenemos hoy, pero hay que transitar este camino para llegar allá. Es un camino de muchos senderos que divergen. ¿Cómo asegurar que todos sigan un buen rumbo sin controlarlos demasiado? Cuanto más captamos que eso es correcto, tanto más podemos tener el núcleo sólido que permita hacer esas cosas. Sin esto, nuestro proyecto comunista no es ni viable ni deseable; pero por el lado positivo, abre más caminos que permiten resolver las contradicciones y abre nuevos caminos para otros.

Así es como veo los dos caminos: ¿vamos a agarrar por este camino o no? ¿Lo que digo es correcto? ¿Es la visión que debemos tener de nuestro proyecto? ¿O es poco realista, idealista, nada que ver con el mundo real? ¿No es lo que debemos proponernos ni adonde debemos apuntar? ¿Tienen razón los que dicen: "Lo quieren hacer, pero no pueden"? Sí, podemos. Es más, es la única manera de hacer lo que tenemos que hacer. No podemos repetir la experiencia [de la revolución proletaria y la sociedad socialista]. No hubieran podido repetir la Comuna de París en la Unión Soviética. Han pasado demasiadas cosas; aparte de la propaganda burguesa, las masas no se animan a repetir lo mismo. Hay que reconocer que en su época fue muy alentador. La revolución china fue mucho mejor que lo que tenían antes y mucho mejor que lo que tienen ahora en China. Pero no basta exhortar a repetirlo ni querrán hacerlo. ¿Es puro idealismo lo que planteo? ¿O es la única forma de avanzar? ¿Cuál es la verdad?

Objetivo y partidista: Buscar la verdad

BA sigue: Esto se ve en el libro de Feigon sobre Mao9 donde Mao habla con su sobrina y ella pregunta cómo "inocularse" contra la Biblia. Mao responde: "Adéntrate bien a fondo y saldrás al otro lado". Mao tenía aspectos de esta orientación mezclada con otras cosas. No temía investigar a fondo ni buscar la verdad. Quizá la tenía aun más que Lenin, pero le estorbó la cuestión de la "verdad política" o "verdad de clase" en nombre de las masas e incluso debido a su preocupación por las masas. Mao se preocupó mucho por las masas, pero había una pugna de las dos orientaciones en Mao también. "¡No necesitas vacuna! Léelo no más y saldrás al otro lado". Como eso, Mao tenía sus cosas muy correctas, pero también tenía el concepto de la "verdad de clase del proletariado", aunque no a la manera estrecha de Stalin en el caso de Lysenko.10

Camarada uno: ¿Qué pasa entonces con lo de objetivo y partidista [que la concepción del mundo del proletariado, de los comunistas, es objetiva y partidista]?

BA: Debemos tener mayor capacidad que nadie de descubrir la verdad. Nuestra orientación no es partidista en el sentido utilitario. Tenemos la concepción del mundo y metodología que corresponde a una clase que ha surgido en el transcurso de la historia, ampliamente hablando, y que no puede emanciparse sin superar y transformar todo eso. Esa concepción del mundo corresponde a los intereses del proletariado, pero no en un sentido estrecho.

Estuve leyendo el libro All the Shah’s Men (Los hombres del sha) de Stephen Kinzer sobre Irán y Mossadegh.11 [En ese tiempo] la CIA controlaba la mayoría de los periódicos [de Irán] y movilizó oposición política a Mossadegh. Se dieron una serie de ataques y Mossadegh no hizo nada para suprimirlos. Al leer eso, pensé: "¡Chin! ¿En qué nos hemos metido con lo del núcleo sólido con mucha elasticidad?" [risa]. Por eso, no soltamos el núcleo sólido y no somos iguales a Mossadegh.

El ejemplo de Brzezinski: en cuanto a lo que dijo de la tradición de autocracia en el movimiento comunista ruso, le contesté que la revolución rusa negó todo eso [se refiere a una parte del libro El falso comunismo ha muerto... ¡Viva el auténtico comunismo! de Bob Avakian].12 Pero al pensarlo más, me pareció que no fue una respuesta completa: Brzezinski tenía razón; y debemos reconocer que en algunos aspectos la tradición autocrática se filtró al movimiento comunista. Abordé este tema en "Las dos grandes cuestas".13

Cuando digo que en la sociedad socialista debemos permitir que los reaccionarios publiquen algunos libros, no es una "táctica astuta". Es bueno que nos interroguen porque aprendemos más sobre la realidad. Es parte de cómo vamos a aprender y cómo las masas van a aprender. Es espinoso, universidades ambulantes y música hip hop odiamujeres. [En la conversación se mencionó el ejemplo de la música hip hop, que surgió de las masas pero era contradictoria, y de las "universidades ambulantes" de Polonia en los 1970, que fueron suprimidas porque iban contra el gobierno]. Si lo único que hacemos es movilizar a las masas a aplastar esas cosas, es igual a la represión del estado, solo que se hace de otro modo. No podemos dejar el campo abierto a la misoginia [filosofía de aversión u odio a las mujeres]. Tenemos que combatirla y suprimirla de alguna manera, pero animar a las masas a oponerse no es siempre la mejor solución. ¿Qué hacer respecto a las universidades ambulantes? ¿Permitirlas de alguna forma o cerrarlas? Es necesario saber qué hacen. No podemos ser Mossadegh; necesitamos una policía política que detecte complots, porque habrá complots para tumbar el socialismo. Pero el estado no debe reprimir toda forma de oposición. A veces ni siquiera es bueno que los cuadros asistan a cosas como esas universidades porque si están metidos, ya no es una universidad libre y eso puede prestarse a crear un ambiente de intimidación. Por eso, debemos pensarlo bien. Si no tenemos un chingo de gente que haya asimilado esta concepción del mundo, metodología y orientación y luche por aplicarla, no tendremos chance de manejar eso correctamente. Es una visión distinta incluso de lo mejor de la GRCP. Se trata de otra dimensión de fermento en la sociedad, como vengo señalando, otra dimensión que abarca el fermento del mundo intelectual. No es ajena a Mao, pero no la elaboró como orientación estratégica general.

En su libro, Feigon dice que Mao se crió con el modelo soviético, por decirlo así, y de repente dijo: "¡No! Tenemos que romper con esta manera de construir el socialismo". Hizo el primer intento. Pero hay otra dimensión, una orientación estratégica que incorpora aspectos de la GRCP. He tenido que luchar duro por ella. Lo que propongo es muy difícil de hacer, pero de plano es la única manera de hacerlo. En el futuro, otros irán más allá con todo lo que es necesario para alcanzar el comunismo; pero en este momento, nos toca pasar por esto.

Si se contrapone a esta orientación incluso lo mejor de la GRCP, se convierte en su contrario. La revolución pasa por etapas y algunos se atoran; algunas cosas se convierten en su contrario, y lo avanzado no sigue siendo avanzado porque surgen nuevas necesidades y toca hacer nuevos avances.

Esta orientación requiere una lucha monumental con las masas. En cuanto a la pregunta del profesor [cómo hacerlo mejor que lo que hicieron en la Unión Soviética y China] dije: por mucho tiempo los que saben más que las masas las han mangoneado, y en la nueva sociedad les va a caer muy gordo que digan que el socialismo no sirve. Agregué: no estoy de acuerdo con ir a la zaga de las masas simplemente porque han sido oprimidas. Van a estar dirigiendo la sociedad y tenemos que decirles la neta y luchar con ellas sobre todo esto. Es muy necesario que sepan distinguir entre los que expresen opiniones reaccionarias y los que se empeñen en tumbar el sistema socialista y, lo más fundamental, que capten por qué es importante hacer esa distinción. El profe me preguntó eso y lo exploré lo mejor que pude. Representa otra dimensión estratégica que abarca y rebasa la GRCP; y si por defender la GRCP nos oponemos a la parte que la rebasa, nos estamos oponiendo a todo.

Es una contradicción espinosa: por un lado, siempre debemos apuntar a conocer la verdad — no la "verdad política" ni la "verdad de clase"— y, por el otro, tenemos que saber cómo dirigir sin soltar el núcleo. Al lidiar con esto, algunos se desvían hacia la socialdemocracia y otros dicen que no hay ningún problema y ni siquiera critican a Stalin. En esta situación, uno puede pensar que si critica a Stalin, hay gente con una posición más a la izquierda y otros a la derecha y, por eso, ¡uno debe tener razón! Ese modo de verlo se opone a la orientación de que lo correcto o incorrecto se determina por la verdad.

Objetivo y partidista es así: si es verdad, ayuda a avanzar y a llegar adonde vamos. Si no es verdad, estorba. Si es verdad, aunque ponga al descubierto nuestro lado más repugnante, lo importante es descubrir la verdad. (Si lo del libro negro fuera cierto, tendríamos que descubrir cómo ocurrió y cómo prevenirlo en el futuro). Si es verdad, podemos abarcarlo y transformarlo y hacerlo parte de lo que somos, aunque ponga al descubierto aspectos malos de lo que hemos hecho. [El "libro negro" supuestamente cuenta la "verdadera historia del comunismo", que considera crimen monstruoso; es una mezcla de calumnias, mentiras y deficiencias y errores reales de la experiencia de la sociedad socialista hasta la fecha].

Esa es la síntesis de objetivo y partidista. O captamos la verdad fundamental de la naturaleza del capitalismo y comunismo... O sea, o captamos científicamente por qué el comunismo debe y puede reemplazar al capitalismo en el mundo entero o no lo captamos, y si no, entonces tememos la verdad.

Tenemos que romper más cabalmente con el instrumentalismo, con las nociones de hacer de la realidad un "instrumento" de nuestros objetivos, de distorsionarla con nuestros fines, y con la "verdad política". La dinámica de "verdades vergonzosas" nos puede hacer avanzar; puede suscitar fermento que nos estimule a captar la realidad. He aquí la objetividad materialista científica. Si nos adentramos lo suficiente en las contradicciones que se plantean ahora, nos damos cuenta de que su resolución puede llevar a una nueva época, y es bueno desatar una dinámica en que nos enseñen nuestras deficiencias. No digo que dejemos que los errores abrumen lo que estamos tratando de hacer, pero en un sentido estratégico [debemos] estar muy receptivos a esto y no tratar de controlarlo demasiado: queremos ese diálogo. Por otro lado, en la internet han salido calumnias y ataques descarados tipo policial contra mí, lo cual no es nada bueno; no es bueno atacar a nadie que busca hacer cosas buenas en el mundo. Hace daño y los que queremos hacer cosas buenas no debemos tolerarlo. Por otra parte, se ha dado un debate político sobre mi papel de líder y sobre los líderes comunistas en general. No se ha dado en un plano muy elevado, pero tiene buen contenido. ¿Acaso es malo tener tal debate ahora y también en el socialismo? ¡No, es muy bueno ! En general, la gente aprende más y nosotros aprendemos más. ¿Qué cosas nuevas vienen surgiendo? ¿Qué debemos hacer para avanzar? ¿Qué fardos tenemos que tirar por la borda? Si captamos esto de la epistemología, decimos, ¡qué bueno! No es meramente una táctica; es un punto de vista estratégico que se desprende de la orientación epistemológica sobre el proceso y cómo debe ser, y el hecho de que con este fermento vamos a llegar adonde tenemos que ir. No debemos simplemente tolerarlo, sino recibirlo con los brazos abiertos, claro, no los insultos, pero en general. ¿Opinamos que es un buen proceso, ahora y también bajo la dictadura del proletariado? ¿O debemos apegarnos al camino aparentemente más seguro de lo que hemos hecho en el pasado?

Me refiero a una nueva síntesis, a una epistemología más cabalmente materialista. En Materialismo y empiriocriticismo Lenin refutó estas cosas [como la "verdad política" o "la verdad como principio organizador"], pero a veces el Lenin práctico tapó al Lenin filosófico. Las exigencias políticas llevaron a una situación en que Lenin tenía aspectos estalinistas en su modo de lidiar con las contradicciones. Hay muchos ejemplos en The Furies (Las furias) [libro de Arno Mayer sobre las revoluciones francesa y rusa].14 En algunas zonas los bolcheviques tenían un método medio mafioso, especialmente durante la guerra civil después de la revolución de octubre de 1917. A veces cuando los reaccionarios organizaban al pueblo a pelear contra los bolcheviques, estos tomaban represalias sin piedad. Otro ejemplo: en la guerra civil, además de ejecutar a desertores del Ejército Rojo, mataron a soldados que no pelearon con ganas. Claro, a veces son necesarias medidas extremas en el fragor de la guerra, pero por lo general no es la forma correcta de manejar esas contradicciones. Abordé algunos aspectos de esto en "Las dos grandes cuestas", pues leí a Lenin al respecto y pensé: "Está mal". Aquí de nuevo vemos que esto encierra cuestiones de epistemología.

Los comunistas queremos la verdad

BA sigue: Quiero establecer una orientación general para nuestro proyecto. ¿Quién tiene razón? ¿La tengo yo o los que dicen que tenemos que hacer las cosas como las hemos hecho hasta ahora? Incluso algunos dicen: "Ojalá que se pudiera, pero no creo que se pueda". ¿Lo que planteo es una orientación materialista hacia nuestro proyecto? ¿De veras tenemos que pasar por todo esto para llegar adonde tenemos que ir? ¿Es acertada la analogía de Einstein y Newton o es puro rollo (pues la física de Newton describe la realidad a nuestro alrededor y tiene pruebas empíricas)? ¿Es cierto que no hay otro modo de hacer lo que estoy proponiendo, que no hay otro modo de llegar al comunismo? ¿O el otro camino es el verdadero?

Lo que propongo, ¿es, cuando mucho, algunas ideas interesantes e intrigantes que hacen reflexionar? ¿O es la orientación que necesitamos, como vengo diciendo?

En lo más fundamental, en relación con lo que dije sobre el hecho de que a los comunistas nos cuesta más que nadie reconocer nuestros errores (en parte porque nadie más busca rehacer el mundo), en realidad, ¿es importante que busquemos la verdad?15 ¿O somos políticos que procuramos cumplir ciertos objetivos políticos y eso de buscar la verdad son puras babosadas pequeñoburguesas, dado que lo que importa es "conquistar el poder"? Es una cuestión fundamental de dos caminos. Una cuestión muy importante es: "¿Buscamos la verdad o es cierto lo de ’la verdad como principio organizador’?". Lenin lo criticó filosóficamente; lo criticamos cuando está al servicio de la religión y el oportunismo (que no son útiles para nosotros), pero de repente acabamos por adoptarlo de otra forma. Mao dijo que los comunistas representamos la verdad y debemos ser francos y científicos. ¿De verdad nos preocupa eso? ¿O nada más nos preocupa conocer la verdad hasta donde sea necesario para lograr lo que consideramos objetivos inmediatos? ¿Solo hasta donde sea necesario para lograr nuestros objetivos, no de la manera más miope, sino para alcanzar las "cuatro todas"? [Las "cuatro todas" son las condiciones necesarias para el comunismo, de acuerdo a la afirmación de Marx de que la dictadura del proletariado es un punto de transición para la supresión de las diferencias de clase en general, para la supresión de todas las relaciones de producción en que estas descansan, para la supresión de todas las relaciones sociales que corresponden a esas relaciones de producción, para la subversión de todas las ideas que brotan de estas relaciones sociales. Eso se aborda más a fondo en la charla de Bob Avakian: "Dictadura y democracia, y la transición socialista al comunismo"].

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Camarada dos: La respuesta fundamental es que somos parte de la realidad material y nuestro escenario (o lienzo) es la materia en movimiento, sobre eso, con eso, trabajamos. No existe la naturaleza humana definida ni determinada. Buscamos transformar el mundo.

La cuestión de falseabilidad. Es una gran crítica que le hacen al marxismo; dicen que en realidad no es una ciencia, que los marxistas no somos rigurosos ni nos apegamos a métodos científicos. Una norma de la ciencia es que exista la posibilidad de probar la falsedad de toda teoría. Hay mucha confusión al respecto. Karl Popper dice que el marxismo no es una ciencia sino una creencia. Por otra parte, [Stephen Jay] Gould dice que la evolución es un hecho. Si es falsa, ¿se puede probar? Sí. Si se descubre algo que invalide todo el marco de esa teoría, caerá. Uno de los puntos fuertes de la evolución es que lleva mucho tiempo como teoría establecida y nadie ha podido demostrar que sea falsa.

Los comunistas tenemos algunas teorías básicas sólidamente establecidas sobre la contradicción fundamental [del capitalismo], etc., pero eso no quiere decir que no habrá mucho cambio y evolución. El conocimiento humano se desarrolla y la materia no es estática. Si se trata de materia en movimiento, hay mucho por aprender en cualquier campo de investigación. Hay muchas conexiones y diálogo entre los diversos campos de la ciencia. Si entendemos que [el comunismo] no es una creencia religiosa sino una ciencia, la verdad importa. Si queremos transformar las cosas, no podemos hacerlo sin comprender la verdad. El único pretexto para no preocuparnos por la verdad es si queremos que el comunismo sea una religión o queremos reducirlo a una especie de código de ética.

¿Lo nuestro es una ciencia? Eso es muy distinto que un código de conducta en nombre de las masas.

Muchos opinan que la ofensiva de los fascistas cristianos contra la evolución motivó la publicación de la serie de artículos en el OR sobre el tema.16 Es cierto, en parte, pero también es muy importante que los comunistas y las masas tengan una comprensión básica de cómo evolucionó la vida del planeta.

Esa miopía nos matará. Importa mucho que comprendamos las leyes básicas de la transformación de la materia.

BA: En cuanto a métodos de dirección, en gran parte he estado luchando [contra la noción] de que en lo concreto no se pueden hacer las cosas de esta manera, en parte porque es muy desordenada, es turbulenta. De alguna manera, al abrir la puerta a la verdad, dejamos pasar a los tiburones. Tenemos nuestras críticas de Stalin y otros tienen las suyas, y es muy cierto lo que dijo Lenin de que se necesitan diez páginas de verdad para contestar una frase del oportunismo, y va a seguir siendo cierto por mucho tiempo en este mundo. Estamos en desventaja porque no siempre disponemos de diez páginas para contestar una calumnia. Otros pueden sacar algo del contexto y divorciarlo de la realidad de la cual surgió. En China pasaron hambre y murieron de hambre durante el Gran Salto Adelante pero, ¿cuál es el contexto? Nuestros enemigos no tienen que ser materialistas ni dialécticos ni tomar en cuenta la realidad, ni las contradicciones ni la necesidad. Tenemos la orientación de luchar por comprender la situación que afrontaron y de analizar cómo hubieran podido hacer las cosas mejor en ese contexto. Otros no hacen eso. Analizan las cosas desde su propio punto de vista de clase, y muchas veces sus afirmaciones combinan ignorancia con arrogancia. Es desordenado. No es igual a unos científicos que se preocupan por la verdad y debaten asuntos relacionados con la evolución; a los creacionistas no les importa la verdad. Otros tienen sus propios proyectos y "verdades políticas"; si tumbamos el rompeolas y dejamos que pasen los tiburones, se va a crear un desorden. El chiste es: ¿es mejor hacer las cosas así o no? ¿O es mejor nadar tranquilo tras el rompeolas, dirigirnos derechito hacia la orilla y más vale no sacar los brazos del barco? Porque en el mar hay tiburones.

Para eso estoy luchando con cuestiones de metodología, epistemología e ideología, y en oposición a "no se puede hacer así" o "nuestro proyecto no es eso y no podemos hacerlo así". ¿Somos una bola de instrumentalistas? ¿Queremos solo la verdad que sea necesaria para navegar estrechamente a una noción de dónde tenemos que ir, lo cual nos llevará a otro lugar? Porque con una orientación incorrecta el barco pierde el rumbo. Filosóficamente, no es posible hacerlo así; no es posible navegar la realidad de ese modo y llegar adonde hay que ir. La realidad no es así. No podemos llegar allí de esa manera y "allí" no será el lugar adonde queremos ir. El único mundo comunista que puede existir es un mundo turbulento y no el reino de la gran armonía. Por eso estoy luchando precisamente. Si uno no lo capta, se convierte en lo que ha caracterizado demasiado a nuestro movimiento: "¿Y a mí que me importa?".

Planteo esta dimensión porque está relacionada con el estereotipo, pero no solo el estereotipo, de cómo somos los comunistas. He estado pensando mucho en Theory of Justice (La teoría de la justicia) de Rawls. Sostiene que no se debe justificar algo por el bien social si pisotea las necesidades y derechos individuales; según él, ese camino lleva al totalitarismo.

Para mí es erróneo; se basa en el idealismo y no en un análisis materialista y concreto de la sociedad. Pero debemos analizarlo, como hice en "Grandes objetivos y gran estrategia".17Toca hacer más trabajo en esa esfera de no pisotear a los individuos simplemente por el bien de la sociedad en general.

En respuesta a los que atacan a Mao por mandar a intelectuales al campo, se ha dicho correctamente: "¡Miren, nadie les preguntó a los campesinos si prefieren estar en el campo!". Eso es muy importante, pero si con eso se acaba el argumento o si solo planteamos ese aspecto, nos lleva de vuelta a ese viejo modo de abordar las cosas, y tiene mucho que ver con si tenemos (o no) la orientación de que la verdad debe importarnos mucho.

Camarada tres: En cuanto al método y la orientación y los tiburones en mares turbulentos: hay muchísimo que nuestra comprensión no abarca en este momento, y a menudo parece que no viene al caso, que es una distracción o una refutación de nuestros principios. Entonces se plantea la cuestión fundamental de orientación epistemológica. ¿Cómo lo vemos? El concepto [del presidente Avakian] está tumbando muchas barreras en ese sentido. ¡Qué bueno! Veamos nuestro análisis de los 1980. [Se refiere al análisis del PCR de que en ese período iba a estallar la guerra mundial entre el bloque imperialista encabezado por Estados Unidos y el de la Unión Soviética a no ser que la previnieran revoluciones en grandes regiones o regiones muy estratégicas del mundo]. Tú exigiste que examináramos qué hicimos [cómo llegamos a ese análisis]. O la autocrítica que hiciste [refiriéndose al presidente Avakian] sobre subestimar la "revolución de la tecnología de información" y [pasar por alto] su importancia. [Se refiere a una autocrítica del presidente Avakian respecto a lo que dijo a principios de los 1980 en el libro Para una cosecha de dragones . Descartó comentarios de líderes revisionistas de la Unión Soviética sobre los grandes cambios que operaban debido a la "revolución de la tecnología de información"]. ¡Lo plantearon los revisionistas soviéticos! Pero aunque en un contexto [pareció] que no tenía nada que ver, todos esos niveles de la realidad, de hecho, son aspectos de la realidad. ¡Es peligroso ignorarlos! Hay mucha oposición [a esta orientación], pero las masas necesitan comprender el mundo en todas sus dimensiones. La humanidad se transforma conscientemente. Eso tiene que ver con transformar toda la realidad material... ¿Qué es el comunismo? ¿Hacia dónde van las cosas cuando hayamos llegado allá? Eso tiene que ver con llegar allá. Una comprensión materialista del mundo y la relación de la humanidad con él. No podemos llegar allá si vamos eligiendo las partes de la realidad que nos parece que importan. Si vamos caminando por el camino economicista y revisionista, los otros aspectos de la realidad son intrusiones desagradables. Pero si de veras somos comunistas y materialistas, importa comprender la realidad material, comprender la economía marxista y el mundo actual, y retratar fielmente la realidad material.

Camarada cuatro: En cuanto a los tiburones. La neta, ¿podemos lidiar con los tiburones? ¿Podemos lidiar con los problemas? Si podemos hacerlo, entonces ¿por qué las masas no? Me hace pensar en una parte de Fin de una etapa... Comienzo de una nueva etapa,8 donde la pregunta era: ¿qué tanto podemos conservar de Stalin? Bajo Stalin pasaron muchas cosas malas y en la Gran Revolución Cultural Proletaria también hubo problemas. Hay que analizar eso y no podemos salvo con la "posición parecida a dios que tiene el proletariado". Pero la fe religiosa estorba e impide que lo hagamos. Finalmente, llegué a ver que es como lo de Nat Turner: los esclavos están haciendo la historia. Tenemos que verlo a la luz de eso. Es válido que los esclavos acaben la esclavitud. A muchos les inquieta examinar estas cosas, pero tenemos que hacerlo... Si no podemos afrontarlo ahora, ¿cómo lo vamos a hacer cuando tengamos el poder?

En la conclusión de la serie "Escalar/volar" dice que hay dos cosas que no sabemos hacer. 9 No sabemos cómo derrotar al enemigo y conquistar el poder cuando llegue el momento y tampoco sabemos todavía cómo resistir la represión mucho más fuerte que viene en camino. Eso es muy grueso. ¿Es correcto hacer las cosas de esta manera? O sea, la idea de que podemos plantear esto a las masas. ¿Debemos hacer esto? La dialéctica del núcleo sólido y elasticidad.) Podemos aguantar todo esto? Se van a dar cosas en la práctica que no controlamos. ¿Es la manera de conocer y transformar el mundo? ¿Por qué necesitamos un espíritu poético, como ha dicho el presidente Avakian? ¿Por qué es peligroso no tenerlo y cómo se relaciona con la sed insaciable de conocer y transformar al mundo? ¿Necesitamos la "posición parecida a dios que tiene el proletariado" y lo que dijiste [el presidente Avakian] sobre la perspectiva de observar el gran desfile de la humanidad? Si no hacemos eso, caemos en sentimentalismo y emocionalismo falso, en lugar de captar que lo que el sistema bloquea y encadena es el potencial de las masas.

Muchas veces me he preguntado por qué el penúltimo párrafo de Cosecha de dragones dice lo que dice. "En última instancia, como lo expresó una vez Engels, el proletariado tiene que conquistar su emnacipación en el campo de batalla. Pero no solo se trata de ganar en este sentido sino de cómo ganaremos en el sentido global. Una de las maneras significativas, quizá sutil y a vecesd poco notada, en que el enemigo, hasta derrotado, pretende tomar represalias contra la revolución y sembrar las semillas de su futura destrucción, consiste en lo que obligaría a los revolucionarios a convertirse para así derrotarlo. La cosa se desenvolverá así: tendremos que confrontarlo en las trincheras y derrotarlo en medio de una horripilante destrucción; pero en el proceso no debemos borrar la diferencia fundamental entre el enemigo y nosotros. Aquí es ilustrativo el ejemplo de Marx: vez tras vez él luchó enconadamente con los ideólogos y apologistas de la burguesía pero nunca luchó rebajándose al nivel que ellos lo hacían ni desde su óptica; con Marx, el método es tan estimulante como es de inspiradora la meta. Debemos tener la capacidad de mantener nuestra firmeza de principios pero al mismo tiempo nuestra flexibilidad, nuestro materialismo y nuestra dialéctica, nuestro realismo y nuestro romanticismo, nuestra solemne claridad de metas y nuestro sentido del humor".20

¿Por qué incluirlo si no estamos ante esa situación? En todo esto el presidente Avakian nos da un modelo y un reto. No es algo secundario o marginal; es una parte clave de lo que estamos haciendo.

Abarca pero no reemplaza: Tiburones y charales

BA: He estado leyendo una entrevista que Barsamian le hizo a Chomsky. De pronto, Barsamian le dice: no le pregunto sobre la relación entre su política y sus teorías lingüísticas, y Chomsky se lo agradece. Ve las dos cosas completamente separadas y lo han bombardeado con el concepto instrumentalista de que "deben estar interrelacionadas" en un sentido mecanicista. Indudablemente, hay una conexión , pero es en otro plano y no en el sentido directo, mecanicista y reduccionista.

Hablando de la capacidad lingüística de los seres humanos, Chomsky pregunta si es correcto concluir que es producto de la evolución y contesta que sí, pero no sabe exactamente cómo. Obviamente, el chiste no es dejarlo así; habrá que investigar más. ¿Nos importa este tipo de trabajo sobre cómo los seres humanos adquirimos conocimientos? ¡Sí!

Se parece al arte en cierto sentido. Nuevamente, podríamos decir que hay tres modelos. Primero, la orientación sindicalista y economicista clásica del Partido Comunista de Estados Unidos de exhortar a los artistas a participar en las huelgas laborales. Segundo, que sean engranajes y ruedas de la maquinaria de la revolución o que hagan arte al servicio de la revolución, aunque no necesariamente en un sentido estrecho. Es bueno que hagan eso. Pero aparte de las "obras modelos" (como las de la Revolución Cultural que también tenemos que aprender a hacer mejor y habrá que dedicarle atención), necesitamos un tercer modelo (u orientación): que hagan arte que no, necesariamente, esté directamente al servicio de la revolución. Cuando planteé estas contradicciones a un artista (¿cómo los artistas podrían crear arte en la nueva sociedad sin perder la conexión con otros artistas y con las masas?), propuso que vivan y trabajen en cooperativas y que, aparte del arte, aporten a la sociedad de otro modo. Vale la pena reflexionarlo, como una dimensión. Claro, habrá que subsidiar tanto cosas que beneficien directamente la revolución como otras que no.

También se deben emprender proyectos aunque no sepamos cuál será el resultado. Necesitamos arte que está directamente relacionado con la lucha, como las obras modelos, y arte que es producto de seguir el impulso creativo. Esa dimensión de las artes y ciencias, digo, ese proceso de dar subsidios a gente que tiene una idea general de lo que quiere explorar... pero si a veces no sale con nada, no debemos concluir que es una pérdida. Hay que reconocer que el proceso implica que a veces no lleva a nada, lo cual está relacionado con lo que dijo Lenin de que el comunismo brota de todo poro de la sociedad, en el sentido más amplio. Sí, [una camarada joven que estudia ciencia] debe librar lucha sobre la filosofía de la ciencia y defender el MLM, entre otras cosas, como el medio que permite conocer más cabalmente la verdad. Pero también es cierto que si fulano de tal descubre algo sobre lo que sucedió el día antes del Big Bang, es: a) interesante y b) se integra, y no en un sentido estrecho, al proceso revolucionario y la lucha de clases. Cada clase interpreta las cosas a su manera y busca suprimir cosas. [No solo el proletariado a veces ha buscado suprimir la ciencia por razones políticas e ideológicas. ¡Miren no más lo que Bush y sus secuaces están haciendo ahora mismo!].

Fíjense que el mundo consta de materia en movimiento, y el materialismo y la dialéctica corresponden a cómo es y nos permiten comprenderlo más a fondo. Por eso, el materialismo dialéctico abarca los nuevos descubrimientos y estos, en realidad, sirven para fortalecerlo, y cuando hay clases que luchan sobre esto, es parte de la lucha de clases en la esfera ideológica. La búsqueda de conocimientos no debe reducirse a los que nos ayuden a librar lucha en la esfera ideológica; más bien, a medida que vamos conociendo la realidad y si captamos más correctamente el materialismo dialéctico, cualquier cosa que se aprenda, cualquier verdad que se descubra, sirve para reforzar, fortalecer y enriquecer el materialismo dialéctico e inevitablemente se integra a la lucha de clases, e incluso en el comunismo, a la lucha ideológica. Claro, una parte de lo que debe hacer esa camarada joven es librar lucha de clases en la esfera [de la ciencia y la filosofía de la ciencia], pero no debe limitarse o reducirse a eso.

Camarada dos: Eso nos lleva de vuelta a cómo estamos capacitando a la gente a pensar. ¿Qué tipo de personas queremos ser, en el sentido de adecuarnos para gobernar? Decimos que las masas buscan filosofía, pero ¿ nosotros la buscamos? El presidente Avakian lucha por rebasar los límites. El método contrario dice: "Tenemos nuestro equipo para hacer la revolución", pero él lo desbarata a cada rato. ¿Cómo vamos a responder a las preguntas que nos plantean diversos intelectuales al respecto de si realmente podemos gobernar de esta manera? Preguntan cómo vamos a manejar esto o lo otro. Muchas veces los comunistas les damos respuestas simplistas y superficiales. Eso no da cabida a muchas cosas y allana el camino para gente como Orwell. Algunas preguntas son malintencionadas, pero no podemos saberlo a priori . Los mares son turbulentos y hay tiburones, pero resulta que también hay muchos charales, pececitos que ni dientes tienen. Tenemos que capacitar a la gente, entre otras cosas, respecto a las contradicciones en el seno del pueblo. La amplia perspectiva de "solo puede abarcar pero no reemplazar" significa que buscamos aprender de toda esfera. ["Solo puede abarcar pero no reemplazar" se refiere a un principio planteado por Mao Tsetung, según el cual el marxismo solo puede abarcar pero no reemplazar las teorías de física, las artes, etc. Bob Avakian lo ha elaborado más. Véase, por ejemplo, "Dictadura y democracia, y la transición socialista al comunismo"]. Se ha dado un debate sobre el desarrollo del mundo: ¿es gradual o puntuado? ¿Eso nos importa? ¿Nos importa cómo es el universo? Importa para captar el movimiento de la materia. Somos parte de ella y se mueve de acuerdo a principios fundamentales. Necesitamos entender estas cosas a través de las ciencias y artes [con] una orientación correcta y sin descartar nada de antemano. En ese sentido, fue incorrecto la supresión que se dio en la Unión Soviética. Si esa línea incorrecta está en el poder, eso sucede. Fíjense, en cuanto a los pececitos, si no buscamos la verdad de las cosas, confundimos los tiburones con los pececitos. La verdad importa mucho, de muchas maneras. ¿Por qué los camaradas se asombraron por tus comentarios [refiriéndose al presidente Avakian] de que en nuestro partido y en la historia del movimiento comunista, ¡la mayoría del tiempo la mayoría de los comunistas no somos comunistas!, y si no rompemos con ciertas cosas, no podremos conquistar el poder, ni hacer nada bueno con él si es que logramos conquistarlo? Si estuviéramos empapados de materialismo, no nos sorprendería y podríamos asimilarlo. No vamos a poder manejar y controlar la verdad. Brota de la materia, y no asusta.

BA: Todo lo que dices es muy importante. A la vez, si no captamos lo que buscamos combatir con el método y orientación que vengo planteando, si no captamos el principio del "núcleo sólido con mucha elasticidad" y cosas por el estilo, nos van a descuartizar. Va a ser desordenado y difícil, pero también estimulante. Significa que de veras tenemos que ser comunistas y aplicar esto en el plano más elevado. Quiero dejar muy claro que si la otra línea domina y se llega al poder con esa línea, será muy malo. Tienes razón: estratégicamente, esto no asusta. En lo fundamental, estoy de acuerdo con tus comentarios, pero quizá hay un aspecto secundario que sí asusta un poco. No debemos minimizar las dificultades. Habrá muchísimo tumulto. El argumento que dice que no se puede hacer esto [de la manera que propongo] tiene una base material.

Pero la realidad material más contundente es que ¡sí se puede! Se puede llevar a la práctica el método y orientación del núcleo sólido con mucha elasticidad que vengo elaborando y por el cual vengo luchando. ¡Sí se puede!, y en realidad es la única manera de hacerlo, la única manera de llegar al comunismo.


Notas

1. Bob Avakian, "Conquistar el mundo: Deber y destino del proletariado internacional", revista Revolución , No. 50 (1981).

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2. "Circular del Comité Central del Partido Comunista de China", 16 de mayo de 1966, en Importantes documentos de la Gran Revolución Cultural Proletaria (Pekín: Ediciones en Lenguas Extranjeras, 1970).

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3. Bob Avakian, ¿Un fin horroroso, o un fin al horror?(Chicago: RCP Publications, 1984).

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4. "Preguntas a Carl Sagan y Stephen Gould", Obrero Revolucionario No. 180 (12 de noviembre de 1982) y "Más preguntas a Carl Sagan, Stephen Gould e Isaac Asimov", Obrero Revolucionario No. 207 (27 de mayo de 1983); en inglés en el libro Reflections, Sketches and Provocations: Essays and Commentary, 1981-1987(Chicago: RCP Publications, 1990).

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5. *"Grandes objetivos y gran estrategia", pasajes de una obra inédita de Bob Avakian, presidente del PCR, EU, que salieron en el Obrero Revolucionario Nos. 1127-1142, del 18 de noviembre de 2001 al 10 de marzo de 2002.

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6. Bill Martin es teórico social y profesor de filosofía de la Universidad DePaul (Chicago). Entre sus muchos libros figuran: Politics and the Impasse (1996), The Radical Project: Sartrean Investigations (2001) y Avant Rock (2002). La editorial Open Court publicará el libro Marxism and the Call of the Future: Conversations on Ethics, History and Politics, de Bob Avakian y Bill Martin, en 2005.

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7. Se puede escuchar la grabación de esta charla en inglés en: BobAvakian.net.

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8. Véase la charla "Dictadura y democracia, y la transición socialista al comunismo".

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9. Véase Lee Feigon, Mao, a Reinterpretation (Chicago: Ivan R. Dee Publishers, 2003).

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10. Véase " La lucha en la esfera de las ideas", de "Dictadura y democracia, y la transición socialista al comunismo", Obrero Revolucionario No. 1250 (22 de agosto de 2004), y en la internet en: rwor.org.

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11. Stephen Kinzer, All the Shah’s Men: An American Coup and the Roots of Middle East Terror (Hoboken, NJ: John Wiley & Sons, 2003). En 1953, Estados Unidos tumbó a Mossadegh, el presidente de Irán (elegido por voto del pueblo y quien tenía mucho apoyo popular) con un golpe de la CIA, que trabajó de la mano con fuerzas reaccionarias de ese país e instaló al sha en el trono. El gobierno del sha, respaldado por el imperialismo yanqui y al servicio de sus intereses, prendió una gran oposición popular pero también fortaleció al fundamentalismo islámico reaccionario, y a finales de los 70 un levantamiento popular tumbó al sha, pero lamentablemente llevó al gobierno de los fundamentalistas religiosos reaccionarios.

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12. Avakian, El falso comunismo ha muerto...¡Viva el auténtico comunismo!(Chicago: RCP Publications, 2004).

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13. "Cómo vencer las dos cuestas: Más sobre conquistar el mundo" es una charla grabada de Bob Avakian de fines de los años 1990. Unas partes de esta charla salieron en el Obrero Revolucionario y están en la internet: "Sobre la democracia proletaria y la dictadura del proletariado - Un punto de vista radicalmente diferente sobre cómo dirigir la sociedad", OR Nos. 1214-1226 (del 5 de octubre de 2003 al 25 de enero de 2004), en la internet en "Sobre la democracia proletaria y la dictadura del proletariado"; "Cómo vencer la cuesta" OR Nos. 927, 930, 932 y 936-940 (12 de octubre, 2 de noviembre, 16 de noviembre y del 14 de diciembre de 1997 al 18 de enero de 1998), en la internet en "Cómo vencer la cuesta"; "Materialismo y romanticismo: ¿Podemos prescindir de los mitos?" OR No.1211 (24 de agosto de 2003) y en la internet en "Nuevos escritores"; y "Otro vistazo a George Jackson" OR No. 968 (9 de agosto de 1998) y en la internet en "Otros escritos".

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14. Arno J. Mayer, The Furies: Violence and Terror in the French and Russian Revolutions (Princeton, NJ: Princeton University Press, 2000).

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15. Véase "Dictadura y democracia y la transición socialista al comunismo", "Parte 8: Hacia el comunismo", OR No.1260 (28 de noviembre de 2004).

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16. La serie "La ciencia de la evolución" de Ardea Skybreak salió en el Obrero Revolucionario en los Nos. 1157, 1159-1160, 1163-1164, 1170, 1179-1183 y 1215- 1223 (30 de junio, 21-28 de julio, 18-25 de agosto, 6 de octubre, y del 15 de diciembre de 2002 al 19 de enero de 2003 y del 12 de octubre al 21 de diciembre de 2003).

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17. "Grandes objetivos y gran estrategia" es una charla de Bob Avakian de finales de los años 1990; unas partes de esta charla salieron en el Obrero Revolucionario en los Nos. 1127 a 1142 (del 18 de noviembre de 2001 al 10 de marzo de 2002) y están en la internet en "Bob Avakian, Grandes objetivos y gran estrategia".

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18. Avakian, "El fin de una etapa—El comienzo de una nueva etapa", de la revista Revolución No. 60 (otoño de 1990).

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19. "Conclusión: Los retos que nos corresponden", Obrero Revolucionario No. 1210 (17 de agosto de 2003). Este artículo es parte de la serie "Escalar las alturas y Volar sin una red de seguridad", una charla de Bob Avakian de finales del año 2002; salió en el OR Nos. 1195-1210 (del 20 de abril al 17 de agosto de 2003).

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20. Avakian, Para una cosecha de dragones: Sobre la "crisis del marxismo" y la fuerza del marxismo ahora más que nunca (Asir Editores Ltda., Bogotá-Colombia, 1989), p. 145-146.

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