El ataque estadounidense-iraquí contra Mosul que está bajo el control del Estado Islámico: un choque asesino entre fuerzas reaccionarias anticuadas

2 de noviembre de 2016 | Periódico Revolución | revcom.us

 

18 de octubre de 2016. Se levanta el humo mientras las personas huyen de sus hogares al comienzo del asalto encabezado por Estados Unidos para volver a tomar la ciudad iraquí de Mosul del Estado Islámico. (Foto: AP)

El 16 de octubre, hasta 100.000 soldados iraquíes, combatientes kurdos, milicianos chiítas y fuerzas estadounidenses lanzaron un ataque militar masivo contra Mosul, la segunda ciudad más grande de Irak. La ciudad está ahora bajo el control del reaccionario y yihadista Estado Islámico que la tomó del gobierno iraquí en junio de 2014.

Según el primer ministro iraquí Abadi y el presidente Obama, es una “operación iraquí” cuyo objetivo es exclusivamente el de “liberar” al pueblo de Mosul.

Puede que los iraquíes constituyan el grueso de las fuerzas, pero esta es una operación dirigida por Estados Unidos que se lleva a cabo de acuerdo con los intereses y objetivos imperialistas de Estados Unidos. Hay unos 12 generales y 5.000 a 6.000 tropas estadounidenses ahora en Irak, las que incluyen a varios “asesores”, fuerzas especiales y “controladores aéreos avanzados” que ahora están en la primera línea en Mosul y jugarán un papel crucial en la batalla. Aún más importante es el poder aéreo estadounidense. Estados Unidos ha llevado a cabo 15.803 ataques aéreos contra el Estado Islámico en Irak y Siria en los últimos dos años y ha sido decisivo en la capacidad del ejército iraquí para volver a tomar otras ciudades, como Ramadi y Faluya, del Estado Islámico y otras fuerzas suníes.

Todas estas batallas lideradas por Estados Unidos han resultado en la muerte masiva, la destrucción y crímenes de guerra. La batalla por Mosul no promete ser diferente. Los combates ya se libran y se cree que durarán semanas o incluso meses. Organizaciones de ayuda humanitaria advierten que la batalla por Mosul podría resultar en la destrucción de gran parte de la ciudad, miles de muertos, y entre 200.000 y un millón de refugiados.

Ya existen informes de ataques aéreos contra un cortejo fúnebre, posiblemente por fuerzas lideradas por Estados Unidos, en la localidad de Daquq, a unos 200 kilómetros (125 millas) al sureste de Mosul. El alcalde informó que 17 personas, la mayoría mujeres y niños, murieron y otros 50 resultaron heridos. Funcionarios militares estadounidenses dicen que están investigando.

Mosul y la realidad infernal de la “liberación” a manos de Estados Unidos

Mosul es una ciudad en el norte de Irak cuya población son ahora principalmente árabes que siguen a la rama sunita del Islam (siendo la otra rama principal el chiísmo). Pero los kurdos, turcomanas, árabes chiítas y otros pueblos tienen lazos históricos con Mosul, un lugar donde muchas de las divisiones étnicas, nacionales y religiosos de Irak se chocan. Mosul es también un ejemplo de cómo la guerra y la ocupación en 2003 por parte de Estados Unidos intensificaron los horrores antiguos y generaron otros nuevos.

Estados Unidos afirmó que invadió Irak para hacer el bien en el mundo, y para liberar al pueblo del tirano Saddam Hussein. Hussein fue un opresor, y el pueblo iraquí necesitaba desesperadamente la liberación, pero los objetivos de Estados Unidos fueron precisamente lo contrario: apoderarse y dominar Irak militar, política y económicamente como parte de un plan más grande de fortalecer el dominio estadounidense en todo el Oriente Medio y el mundo. Un elemento clave de este plan fue “drenar el pantano”: remodelar Irak y otras sociedades de la región para transformar los factores sociales, políticos y económicos que impulsan el crecimiento del fundamentalismo islámico anti-Estados Unidos. Pero ese plan no funcionó en Irak — ni en cualquier parte. En su lugar, Estados Unidos no pudo lograr sus objetivos en Irak, y sus acciones resultaron en nuevos horrores e inestabilidad, entre otras cosas reforzando y alimentando el fundamentalismo islámico reaccionario.

Derrocaron a Hussein y Estados Unidos instaló un nuevo régimen dominado por los reaccionarios partidos religiosos chiítas y las burguesas fuerzas kurdas, deseosos de apoderarse del botín de guerra. Estados Unidos y el nuevo régimen suprimieron en específico a los sunitas de Irak, una base del régimen de Hussein. Una brutal ocupación imperialista, una sectaria guerra civil y la violenta limpieza étnica estallaron rápidamente y se han prolongado en una forma u otra desde entonces, centrado ahora en Mosul.

Este caldero horrible ha provocado la muerte de entre 600.000 y 1,4 millones de iraquíes y el desplazamiento de más de cuatro millones más. Todo esto en gran medida fortaleció el fundamentalismo islámico reaccionario, tanto entre los chiítas como los suníes, y alimentó el surgimiento del Estado Islámico, basado entre los suníes, de Al Qaeda en Irak en 2013.

Mosul ha sido un microcosmos de los múltiples traumas infligidos al pueblo iraquí desde 2003. El periodista Patrick Cockburn señala que si las fuerzas lideradas por Estados Unidos se apoderan de Mosul, “será la quinta vez que la ciudad ha cambiado de manos en el transcurso de los 13 años de la guerra” (“Mosul braces itself for next bloody chapter having been ravaged by 13 years of war” [Mosul se prepara para el próximo capítulo sangriento de haber sido devastado por 13 años de guerra], The Unz Review, 19 de octubre de 2016). Todas las fuerzas han sido reaccionarias: las fuerzas kurdas y árabes que saquearon la ciudad tras la caída de Saddam; las fuerzas de Estados Unidos que las reemplazaron; entonces el odiado gobierno iraquí; luego, en junio de 2014, el Estado Islámico, después de que el ejército iraquí se huyó presa del pánico en lugar de luchar.

El Califato del Estado Islámico — una pesadilla medieval, no una respuesta al imperialismo

Lea también:

The New Communism by Bob AvakianUna carta a la redacción:
Un punto adicional sobre el nuevo libro de Bob Avakian

El mundo necesita EL COMUNISMO NUEVO

Lea más...

A la venta: HAGA SU PEDIDO AQUÍ
SOBRE EL LIBRO AQUÍ
Se puede descargar aquí, en inglés, el pdf del avance de esta importante obra. Para leer el Índice y pasajes en español, haga clic aquí

En esta situación, y con la falta de una verdadera alternativa comunista revolucionaria con una presencia concreta en Irak, los crímenes de guerra del imperialismo han empujado a sectores de personas enojadas a los brazos de los yihadistas islámicos fundamentalistas. Una expresión trágica de este fenómeno ocurrió cuando el Estado Islámico expulsó por primera vez a las fuerzas odiadas del gobierno iraquí — cientos de personas aclamaron a los yihadistas.

Sin embargo, pocas semanas después de tomar Mosul, con mucho la mayor ciudad bajo su control, el Estado Islámico declaró la formación de un califato —una teocracia islámica que asevera encarnar el Islam que practicaban el profeta Mahoma y sus seguidores en el siglo VII— que se extiende por el norte de Irak y Siria, con varios millones de personas ahora bajo control del Estado Islámico. La toma de Mosul y la formación del califato del Estado Islámico estableció el polo de la reaccionaria yihad fundamentalista en toda la región y el mundo, y atrajo a miles de reclutas, mientras asustó a los imperialistas y los estados opresores de la región y representó un nuevo e importante reto para ellos.

El Estado Islámico se declaró la alternativa al imperialismo, una que traería la verdadera justicia y el fin de la opresión.

Pero el dominio del Estado Islámico resultó ser otra versión de infierno para los aproximadamente 1,2 millones de personas que aún viven en Mosul, que no tiene nada que ver con la emancipación de la humanidad. Durante la toma de Mosul, los combatientes del Estado Islámico mataron a unos 600 reclusos de la prisión de Badoush — por ser chiítas. Han masacrado a cristianos y yazidíes (una comunidad religiosa de etnicidad kurda), han violado, abusado, capturado y vendido como esclavas sexuales a mujeres de estas religiones. Han obligado a la población a vivir bajo la ley medieval sharia, las mujeres esclavizadas y obligadas a ponerse la nicab, un velo con sólo una pequeña abertura para ver. Las infracciones, tales como faltar a las oraciones, pueden resultar en latigazos, y oponerse al Estado Islámico resulta en la ejecución sumaria. Han destruido monumentos históricos irremplazables por ser “anti-islámicos”. Y han utilizado la ciudad como una base de apoyo para ataques yihadistas reaccionarios por toda la región y el mundo.

El asalto encabezado por Estados Unidos resultará en crímenes de guerra

Bob Avakian sobre el ascenso del fundamentalismo islámico: Pasajes de ¡Fuera con todos los dioses!

El fundamentalismo religioso, el imperialismo y la "guerra contra el terror"
Lea más...

¿Por qué está creciendo el fundamentalismo religioso en el mundo actual?
Lea más...

Los habitantes de Mosul —e Irak— necesitan la liberación, pero este asalto encabezado por Estados Unidos se trata de la sustitución de un opresor reaccionario por otro.

Los gobernantes de Estados Unidos afirman que ya no tienen “botas sobre el terreno” en el Medio Oriente y ya no están en guerra. Mosul, y mucho más, ponen en evidencia estas mentiras. Estados Unidos se dedica a sus intereses imperialistas en Mosul, igual que en cualquier otro lugar en Irak, la región y el mundo. En este momento esos intereses tienen que ver con derrotar el califato del Estado Islámico (aunque los imperialistas apoyan fuerzas yihadistas islámicas en otros lugares, como el Frente Nusra en Siria); tienen que ver con hacer de Irak un aliado más fiable; y tienen que ver con fortalecer la posición de Estados Unidos en las maniobras feroces actuales entre Estados Unidos y Rusia, así como diversas potencias regionales reaccionarias, por territorio e influencia ahora centrados en Irak y Siria. Hillary Clinton aplaudió el asalto a Mosul en el debate de octubre de 19 con Trump y pidió que Estados Unidos “siga presionando a Siria para que comience a recuperar y atacar a Al-Raqa,” la sede del Estado Islámico.

La forma en que libran esta guerra refleja esos objetivos reaccionarios. Obama afirma que “la ayuda humanitaria para la población civil” es una “prioridad principal”. Pero los que llevan a cabo este asalto son fuerzas armadas reaccionarias que dependen en última instancia del poder aéreo estadounidense.

“Hemos escuchado, ya sabes, descripciones de victorias de las fuerzas del gobierno iraquí al tomar Ramadi y Faluya, Tikrit y otros lugares”, el periodista Patrick Cockburn dijo a Democracy Now! acerca de los ataques previos encabezados por Estados Unidos contra ciudades controladas por el Estado Islámico u otro fuerzas sunitas. “Pero en realidad lo que sucede es que las fuerzas avanzan y entonces piden ataques aéreos. En Ramadi, demolieron a 70, 80 por ciento de la ciudad. En las afueras de Faluya, hay otro pueblo en que sólo quedan cuatro edificios. Por lo que es en gran medida una operación dirigida por Estados Unidos”. (19 de octubre de 2016)

Toda guerra y asalto militar estadounidense, no importa lo “preciso” que afirmen ser sus armas, ha resultado en la muerte, el sufrimiento y la destrucción en gran escala — y frecuentemente en crímenes de guerra. Parece que Mosul no será diferente. (En los medios de comunicación estadounidenses ya se informan que el Estado Islámico está utilizando a civiles como “escudos humanos” en Mosul. El Estado Islámico es ciertamente capaz de tal cosa, pero esto también puede tener como objetivo preparar el terreno para culpar al Estado Islámico por muertes de civiles causadas por Estados Unidos).

Y la “liberación” de Mosul puede ser sólo el comienzo de una nueva pesadilla para la gente de esa ciudad. La “coalición” encabezada por Estados Unidos que rodea su ciudad y pueblos cercanos incluye a milicias chiítas reaccionarias que han llevado a cabo ejecuciones y secuestros sectarios y vengativos en otras áreas tomadas del control del Estado Islámico.

Un choque de fuerzas reaccionarias y la urgente necesidad de forjar otro camino

Los últimos 13 años de guerra e intervención estadounidenses en Irak, hasta el asalto a Mosul por venir, ponen de relieve la importancia del siguiente análisis del líder revolucionario Bob Avakian:

Lo que vemos en contienda, con la jihad por un lado y McMundo/McCruzada [el imperialismo occidental cada vez más globalizado] por el otro, son sectores históricamente anticuados de la humanidad colonizada y oprimida contra sectores dominantes históricamente anticuados del sistema imperialista. Estos dos polos reaccionarios se oponen, pero al mismo tiempo se refuerzan mutuamente. Apoyar a uno u otro de esos polos anticuados, acabará fortaleciendo a los dos.

Esta es una formulación muy importante y crucial para entender muchas dinámicas que impulsan el mundo en este período, pero tenemos que tener en claro cuál de “los dos sectores históricamente anticuados” ha causado más daño y representa la mayor amenaza a la humanidad: los sectores dominantes históricamente anticuados del sistema imperialista, y en particular los imperialistas estadounidenses.

Lo BAsico 1:28

Si usted vive en Estados Unidos y sinceramente quiere pone fin a los crímenes de guerra tanto por parte del Occidente como el fundamentalismo islámico reaccionario, entonces tiene que empezar oponiéndose a los crímenes de su gobierno y estas últimas acciones bélicas. Cuantas más personas han apoyado los ataques estadounidenses contra los yihadistas reaccionarios — o quedado de brazos cruzados—, esto ha reforzado las dos pesadillas para la humanidad. Esa es una lección clave de los últimos 13 años.

La otra lección clave es la necesidad urgente de proyectar una alternativa revolucionaria y emancipadora a estas dos pesadillas para la humanidad. Tal alternativa es la revolución concreta, una verdadera revolución comunista basada en la dirección y el trabajo de Bob Avakian, tal como se concentran en su recién publicado libro, EL COMUNISMO NUEVO. La difusión de esta obra pionera a lo largo y ancho —inclusive en las regiones ahora embrolladas en la agitación y la guerra— es una forma crucial de forjar esa alternativa emancipadora alrededor del globo.

 

Se necesitan: Voluntarios para revcom.us y Revolución

Envíenos sus comentarios.

Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.

REVOLUCIÓN Y RELIGIÓN: La lucha por la emancipación y el papel de la religión
Lo BAsico, de los discursos y escritos de Bob Avakian
CONSTITUCIÓN Para La Nueva República Socialista En América Del Norte (Proyecto De Texto)
Lo que la humanidad necesita: Revolución, y la nueva síntesis del comunismo Una entrevista a Bob Avakian
No sabes lo que crees que 'sabes' sobre… La revolución comunista y el VERDADERO camino a la emancipación: Su historia y nuestro futuro Una entrevista a Raymond Lotta.
La opresión del pueblo negro, los crímenes de este sistema y la revolución que necesitamos