El alboroto reaccionario sobre el incidente en Chicago — una ominosa señal de lo que vendrá si se le permite que gobierne el régimen fascista de Trump y Pence

11 de enero de 2017 | Periódico Revolución | revcom.us

 

Este país está a pocos días de instalar un régimen fascista. En Carolina del Sur, está en sesión la audiencia para sentenciar a Dylann Roof, el joven supremacista blanco que mató a nueve afroamericanos que estudiaban juntos la Biblia en una histórica iglesia negra en Charleston. No obstante, ¿cuál es la noticia principal en la prensa nacional, divulgándose viralmente por las redes sociales, y el acto más despreciable y depravado según la actual administración, la CNN y todos los portavoces de la derecha? Un incidente en Chicago en el que se dice que cuatro jóvenes negros secuestraron a un hombre blanco con problemas mentales y lo atormentaron, incluso forzándolo a gritar “fuck Trump” [que Trump vaya a la mierda] con alguien al fondo diciendo “fuck White people” [que los blancos vayan a la mierda].

En respuesta, una malvada turba de linchamiento a nivel nacional exige que a estos jóvenes se les acusen de un crimen de odio, además de los cargos ya impuestos, secuestro agravado, agresión con un arma mortal y otros. A través de las redes sociales, personas como el anfitrión de la radio el reaccionario Glenn Beck afirmaron que este fue el resultado del movimiento Black Lives Matter (BLM) / La Vida los Negros Importa, y de las tácticas policiales demasiado “indulgentes”. Beck le dijo a su más de un millón de seguidores de Twitter: “Levántense conmigo y piden justicia en Chicago por la paliza de un partidario discapacitado de Trump a manos de BLM”. Mike Cernovich, un importante arquitecto de las campañas de los seguidores de Trump en las redes sociales, cantó victoria por conseguir que acusaran a los jóvenes negros de un crimen de odio.

Piénsenlo. De la noche a la mañana, cuatro jóvenes negros de Chicago se convirtieron en la personificación del mal, no el régimen fascista de Trump y Pence que amenaza con eviscerar los derechos políticos y legales en Estados Unidos y hacer cosas monstruosas a siete mil millones de personas en este planeta, hasta intensificando la posibilidad de una guerra nuclear.

También es una indicación siniestra de lo que vendrá con Trump y su “Hacer que Estados Unidos vuelva a tener grandeza”, una parte de la cual se traduce a “Hacer que Estados Unidos vuelva a ser blanco”, azuzando la supremacía blanca y la histeria de la turba de linchamiento en contra de los negros.

Es bien claro que golpear y atormentar al joven estuvo mal y ningún ser humano debe ser tratado así. Además, independientemente de lo que haya sucedido en realidad, este incidente no tiene nada que ver con aquellos que se oponen al régimen de Trump y Pence y que se esfuerzan por impedir que tomen poder ni con el movimiento Black Lives Matter, y por supuesto no aprueban el incidente. Además, se trataba de una situación aislada.

En contraste, Trump realmente fomentó la violencia en sus mítines y dijo que con alegría pagaría las cuentas legales de los que golpearon a manifestantes pacíficos. Excusa abiertamente, mira por otro lado, y en realidad azuza la violencia y odio contra varios sectores de la gente que considera “indeseables”, una de las razones por reconocerlo como un fascista.

A principios de la campaña presidencial, dos hombres blancos en Boston golpearon a un hombre sin hogar de herencia mexicana con una vara de metal y orinaron sobre él, diciendo: “Donald Trump tenía razón. A todos estos ilegales hay que deportarlos”. ¿La primera respuesta de Trump? “La gente que me sigue es muy apasionada. Les encanta este país. Quieren que este país vuelva a tener grandeza”.

Desde la elección de Trump, en todo Estados Unidos han salido reportes de estudiantes latinos amenazados y atormentados por otros estudiantes que cantan, “construyan el muro” y “regresen a México”. Las agresiones sexuales contra las muchachas jóvenes han aumentado desde que Trump se jactó de hacerla. Mezquitas en California y Georgia han recibido cartas que amenazaron que Donald Trump “les va a hacer a los musulmanes lo que Hitler hizo a los judíos”. Una profesora del Orange Coast College se vio obligada a esconderse debido a las amenazas de muerte que recibió tras una conferencia que criticó la elección de Trump.

¿Dónde está la indignación nacional y la cobertura de primera plana de todos estos crímenes de odio e intimidación a manos de Trump y sus partidarios?

A menos que haya una lucha política masiva de millones de personas que lo impida, Trump será comandante en jefe, con el fascista cristiano Pence a su lado, en unas pocas semanas. ¡NO! ¡NO! ¡NO!

 

Se necesitan: Voluntarios para revcom.us y Revolución

Envíenos sus comentarios.

Si le gusta este artículo, suscríbase, done y contribuya regularmente al periódico Revolución.