Bombas en Jerusalén/Arrestos en Nueva York: Lo que quieren tapar: Justicia para el pueblo palestino

Obrero Revolucionario #919, 17 de agosto, 1997

El 30 de julio estallaron dos bombas en un mercado al aire libre de Jerusalén. Murieron 15 personas, entre ellas dos palestinos que las autoridades israelíes acusaron de poner las bombas. Inmediatamente, el gobierno de Benjamín Netanyahu impuso una feroz represión: cerró las fronteras de la Gaza y Cisjordania, donde viven centenares de miles de palestinos, y lanzó una racha de allanamientos y arrestos. Para colmo, amenazó con lanzar ataques relámpago en las zonas "autónomas", que se supone que gobierna la Autoridad Palestina de Yasir Arafat.

Como siempre, las acciones del gobierno sionista son cínicas y mortíferas: dice que es "víctima" de la violencia y con pretexto lanza represalias violentas contra los palestinos. En realidad, Israel (con el apoyo de Estados Unidos y otras grandes potencias) le ha robado al pueblo palestino sus tierras y recursos, ha expulsado a millones, ha lanzado guerras de conquista contra países árabes vecinos y ha cometido un sinnúmero más de crímenes. El pueblo palestino es el que ha sufrido su violencia reaccionaria.

Netanyahu está aprovechando el dinamitazo para presionar a Arafat a ceder más en las negociaciones de "paz". Desde el principio, este "proceso de paz" impuesto por Washington ha tenido una sola meta: estabilizar la dominación sionista acorralando a los palestinos en pequeñas zonas "autónomas" rodeadas por el ejército israelí y colonos reaccionarios. Dejará a la nación palestina a la merced del yugo económico y militar sionista. Pero eso no satisface al gobierno israelí, que sigue pullando a los palestinos, por ejemplo construyendo nuevos asentamientos israelíes en barrios palestinos del este de Jerusalén. Como de costumbre, responde a toda resistencia palestina con salvajismo.

Todavía no se sabe quién es responsable del dinamitazo. En un principio, Israel le echó la culpa al grupo fundamentalista Hamas, pero después se calló. Como sea, los sionistas no tienen ningún derecho de hacerse pasar de víctimas ni de aprovechar el dinamitazo para atacar a los palestinos.

*****

Dos días después del dinamitazo del mercado, las autoridades de Nueva York arrestaron a dos hombres y los acusaron de planear dinamitazos de una estación del metro y un camión de pasajeros. Los medios informaron que los dos son palestinos con pasaportes jordanos.

Hasta la fecha, no han divulgado ninguna declaración directa de los dos arrestados, así que todo lo que se conoce es de boca de la policía y las autoridades federales. Por tanto, hay que ver con mucha sospecha el cuento que repite la prensa acerca de un "complot dinamitero".

Las autoridades dicen que un inmigrante egipcio paró un radiopatrulla en plena noche y le "confesó" que sus compañeros de cuarto planeaban poner bombas. La policía acordonó el vecindario, evacuó a los vecinos, tomó por asalto el apartamento y arrestó a los dos hombres, que fueron heridos en el ataque. Dice que encontró materiales para la construcción de dos bombas en el apartamento.

El incidente provocó un brote de histeria "contra el terrorismo". La prensa y el gobierno hicieron todo lo posible por conectar el arresto en Brooklyn con el dinamitazo en Jerusalén, aunque los lazos son sumamente débiles. Por ejemplo, la policía afirma que uno de los dos expresó apoyo por el dinamitazo de Jerusalén, pero no le han permitido decir nada en público. Otra "prueba" es el hecho de que los dos tienen pasaportes jordanos, que supuestamente los vinculan a un dirigente de Hamas que vive en Jordania. Pero muchos palestinos tienen pasaportes jordanos. También se dice que uno de los dos admitió que el ejército israelí lo detuvo y lo acusó de ser simpatizante de Hamas. Pero su familia dice que fue cuando tenía 17 años, y que los soldados israelíes hicieron arrestos en masa ese día por una pedrea.

La versión oficial es muy sospechosa. ¿No es muy conveniente que los arrestos en Nueva York fueran dos días después del dinamitazo de Jerusalén? ¿Quién es el misterioso delator, y por qué la prensa y las autoridades dicen tan poco sobre él?

En el derecho hay un principio que se llama qui bono, que quiere decir a quién le conviene. Cuando se investiga algo misterioso hay que preguntar: ¿a quién le conviene? Ese principio nos dice que a quien más le conviene este asunto es a Israel.

Si bien Estados Unidos es el padrino de Israel, de vez en cuando ciertos intereses de corto plazo de los sionistas están en contradicción con los intereses de largo plazo del imperialismo yanqui. Un ejemplo es la leve protesta de Estados Unidos por la construcción de multifamiliares en zonas palestinas del este de Jerusalén, porque teme que eso genere más oposición palestina al "acuerdo de paz". El descubrimiento del "complot dinamitero" en Nueva York da a los sionistas la oportunidad de decir que los fundamentalistas islámicos y los palestinos nacionalistas son una amenaza para Israel y para Estados Unidos, y que por tanto este debe tratar con mano dura a los palestinos. Además, es una oportunidad para inclinar la opinión pública en Estados Unidos a favor de Israel y en contra de los palestinos.

Todo mundo sabe que los servicios de espionaje israelíes infiltran grupos fundamentalistas islámicos. A varios palestinos y egipcios los condenaron en Nueva York del dinamitazo del World Trade Center de 1993, a pesar de muchas pruebas de que los servicios de espionaje israelíes, estadounidenses y egipcios estaban inmiscuidos, y de que todo pudo ser una trampa de ellos. ¿Habrá una intriga similar en este caso?

Si es cierto que gente opuesta a Israel y Estados Unidos planeaba una acción, ¿qué posición deben tomar los oprimidos en este país? Primero, hay que diferenciar entre la violencia injusta de los opresores y la violencia justa de los oprimidos. Hay que comprender que muchas fuerzas políticas tienen contradicciones con los imperialistas estadounidenses; en el caso de los fundamentalistas islámicos, se deben a ideas retrógradas y feudales. Pero los pueblos de las naciones oprimidas, que han sido víctimas de la explotación, dominación, saqueo y bombardeos de Estados Unidos y sus aliados, tienen muchas reivindicaciones justas.

El gobierno siempre dice que los que recurren a la violencia para combatir el sistema son "terroristas", y aprovecha incidentes como el de Nueva York para fomentar histeria "contra los terroristas", y en muchos casos contra los inmigrantes. Durante la evacuación del multifamiliar de Nueva York, las autoridades maltrataron a paquistaníes por ser musulmanes; además, hay muchos informes de maltrato a árabes en la ciudad. Cuando se supo que uno de los arrestados había sido detenido previamente por la Migra, el alcalde de Nueva York exigió que refuerce su aparato. Se están valiendo de la supuesta "amenaza terrorista" para llevar a cabo una enorme movilización policial y otras medidas fascistas.

Los que se han dejado embaucar por esta avalancha reaccionaria deben ponerse en la posición del pueblo palestino. ¿Qué pensarías si el territorio en que tu pueblo ha vivido durante siglos de repente fuera ocupado por un salvaje ejército? ¿Si tú, tu familia, pueblos enteros y de hecho toda la nación fuera expulsada y las casas destruidas? ¿Si te obligaran a vivir en campos de concentración en el desierto o en el exilio, mientras las fuerzas de ocupación se apoderan de las mejores tierras y recursos? ¿Si año tras año te humillaran y maltrataran, si te trataran como un ser infrahumano? ¿No sentirías un profundo odio contra los que se apoderaron de tu tierra y las grandes potencias que los respaldan? ¿No tendrías ganas de contraatacar como fuera contra el odiado enemigo?

*****

Los imperialistas yanquis se han declarado los "conciliadores", la fuerza "razonable" que unirá a los israelíes y palestinos y llevará la "paz" al Oriente Medio. Clinton dijo que el dinamitazo de Jerusalén "fue un ataque contra la mayoría de los israelíes, palestinos y árabes que quieren una paz duradera y justa".

Mentiras. Primero, Estados Unidos no es una fuerza imparcial que quiere conciliar a Israel y los palestinos, sino la principal potencia imperialista que respalda al estado sionista. Le da a Israel billones de dólares de ayuda militar y económica al año; a cambio, Israel es su principal puesto de avanzada regional.

Segundo, sin justicia para el pueblo palestino no puede haber paz en Palestina. El "proceso de paz" que tramó Estados Unidos nunca llevará a la justicia, la liberación ni la autonomía de la nación palestina; su meta es todo lo contrario.


This article is posted in English and Spanish on Revolutionary Worker Online
http://rwor.org
Write: Box 3486, Merchandise Mart, Chicago, IL 60654
Phone: 773-227-4066 Fax: 773-227-4497
(The RW Online does not currently communicate via email.)