Redada en Chiapas
Obrero Revolucionario #953, 19 de abril, 1998
Al cierre de esta edición: A las 4:30 de la madrugada del 11 de abril, unos 500 soldados, policías y agentes de inmigración mexicanos rodearon una cooperativa campesina llamada Taniperlas en el norte de Chiapas. Bloquearon la entrada y requisaron ciertas casas apuntadas en una lista. La comunidad acababa de declararse "autónoma" de los gobiernos federal y estatal, y de cambiar su nombre al del héroe revolucionario Flores Magón.
El gobernador de Chiapas, Roberto Albores Guillén, anunció que la policía arrestó a 20 personas. Una organización de derechos humanos informó que la redada se llevó a cabo sin orden.
La redada representa una escalada de los ataques contra los simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) que quieren gobiernos locales autónomos. En Chiapas, más de 30 comunidades han establecido gobiernos independientes con sus propios archivos de nacimiento y defunción, y que movilizan a bloquear el paso a funcionarios de los gobiernos federal y estatal.
El gobierno central sirve a los terratenientes y las potencias imperialistas. Agentes del partido del gobierno, el PRI, han organizado escuadrones de la muerte en Chiapas y otros estados para sembrar terror.
En la rueda de prensa en que anunció la redada, Albores Guillén amenazó con lanzar más ataques. Dijo que ahora no permitirá que se establezcan municipios autónomos.
La redada contra Flores Magón también representa una escalada de la campaña para expulsar a extranjeros que apoyan la lucha. De los arrestados, 11 eran extranjeros de una organización de derechos humanos, que provienen de Estados Unidos, Alemania, España, Canadá y Bélgica. Fueron a documentar el maltrato en el estado y estaban en Flores Magón para observar la toma de posesión del nuevo gobierno.
Los observadores extranjeros han desenmascarado muchas barbaridades del ejército y el PRI. El hecho de que la clase dominante quiere expulsarlos es una señal de lo que tiene planeado para el futuro. El EZLN surgió como una fuerza campesina armada en enero de 1994. Las pláticas de paz se suspendieron en 1996 y el gobierno ha despachado más efectivos y cometido repetidas barbaridades, como la masacre de 45 campesinos por un grupo paramilitar en diciembre en Acteal. Por su parte, Washington ha dado muchas formas de ayuda militar a las operaciones de contrainsurgencia del gobierno mexicano.
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