Mensaje al Partido Comunista de Filipinas con motivo del 30 aniversario de su reestablecimiento

Del Partido Comunista Revolucionario, EU

Obrero Revolucionario #987, 20 de diciembre, 1998

Hace 30 años, los revolucionarios proletarios de Filipinas repudiaron totalmente su vieja dirección revisionista y reestablecieron el Partido Comunista de Filipinas. A esos audaces camaradas no los desalentó el hecho de que eran pocos ni de que encaraban un enemigo brutal y poderoso: el reaccionario gobierno filipino apuntalado por el imperialismo estadounidense. Aplicando la ciencia forjada por Marx, Lenin y Mao a las condiciones concretas de Filipinas, los camaradas del PCF fueron al campo para movilizar y dirigir a los campesinos a llevar a cabo la revolución agraria y establecer nuevas formas de poder político rojo. Además, tomando como punto de partida la enseñanza de Mao de que "sin un ejército popular, nada tendrá el pueblo", el PCF planteó la lucha armada como la principal forma de lucha y construyó el Nuevo Ejército Popular.

El PCF y el NEP empezaron con pocos combatientes y pocas armas; en un largo proceso, con muchas vueltas y revueltas, echaron profundas raíces en el campo, llevaron la guerra popular a todo el archipiélago y le asestaron poderosos golpes al imperialismo yanqui y a los reaccionarios filipinos. El PCF, que es la vanguardia del proletariado, construyó un frente único de todas las clases revolucionarias y progresistas contra el imperialismo, el feudalismo y el capitalismo burocrático. En plena lucha contra las repetidas campañas de cerco y aniquilación del enemigo, y con sentido histórico, el PCF anunció que su lucha era parte de la revolución proletaria mundial.

El desarrollo de la revolución de nueva democracia y de la guerra popular en Filipinas es un poderoso ejemplo de la verdad de que el que sea correcta o no la línea ideológica y política lo decide todo. Como dijo Mao, quien siga una línea correcta llegará a tener soldados aunque ahora no tenga ninguno.

El reestablecimiento del PCF y el NEP ocurrió durante las poderosas tormentas revolucionarias que sacudieron el mundo en esa época. En los países oprimidos, tanto como en las ciudadelas imperialistas, los pueblos se rebelaron contra la opresión y la injusticia. La Gran Revolución Cultural Proletaria de China, bajo la dirección de Mao Tsetung, inspiró a una nueva generación de rebeldes comunistas. Nuestro partido, como el suyo, también tiene raíces en esos años de torbellinos revolucionarios.

En los 30 años transcurridos desde entonces, el mundo ha pasado por importantes cambios. En China, los revisionistas dirigidos por Deng Xiaoping conquistaron el poder después de la muerte de Mao en 1976, encarcelaron a sus sucesores revolucionarios y restauraron el capitalismo. El imperio socialimperialista dirigido por la revisionista Unión Soviética se desplomó y lo reemplazó el gobierno burgués "tradicional" de la Rusia de hoy. Libres de un mundo dividido en dos bloques imperialistas rivales, Estados Unidos y otras potencias han acelerado el proceso de globalización capitalista y la penetración de los países oprimidos.

A pesar de todas esas transformaciones, al nivel más básico el sistema imperialista sigue igual. Estamos en la época del imperialismo y la revolución proletaria, y el imperialismo sigue siendo un ente putrefacto y moribundo desde un punto de vista histórico. La brecha entre las naciones ricas y las pobres se amplia y es más criminal. En los países como Filipinas, pequeñas islas de riqueza están rodeadas de un inmenso mar de pobreza, hambre y miseria. El carácter despiadado y parasítico del capital imperialista lleva a más dislocaciones y trastornos por todo el mundo, y existe la posibilidad de que todo eso se intensifique.

El trastorno y el sufrimiento que conlleva el imperialismo preparan el terreno para el avance de las luchas revolucionarias y guerras populares. Esa situación crea condiciones favorables (y le da mucha urgencia) al crecimiento y desarrollo de partidos y organizaciones marxista-leninista-maoístas en todos los países.

En ese contexto, se destaca más que nunca la importancia del Segundo Gran Movimiento de Rectificación, iniciado por el Comité Central del PCF. En muchos países, la dirección de las justas luchas de los oprimidos ha seguido un camino de traición y derrota, pero el PCF ha librado una lucha para reafirmar el camino trazado por Mao y para arrancar de raíz líneas incorrectas. Unos urgieron abandonar el camino maoísta de la revolución de nueva democracia y la guerra popular; dijeron que es anticuado y que no es aplicable a las condiciones actuales en Filipinas. Hubo el peligro de abandonar el penetrante análisis de Mao del revisionismo y las grandes lecciones de la Revolución Cultural. Pero mediante la campaña de rectificación, y en medio de perseverar en la guerra popular, los camaradas del PCF han vuelto a estudiar larga y detenidamente las obras de Mao, han sacado un balance de sus propios errores y los han corregido.

Como partido participante del Movimiento Revolucionario Internacionalista, el Partido Comunista Revolucionario,EU, acoge con entusiasmo ese crucial movimiento de rectificación. Nos solidarizamos profundamente con los esfuerzos de los camaradas del PCF por extirpar y derrotar las líneas incorrectas, revitalizar a los revolucionarios veteranos y movilizar a una nueva generación de revolucionarios para seguir el camino maoísta de la liberación.

Las luchas populares en Filipinas y Estados Unidos tienen fuertes vínculos. El imperialismo estadounidense es nuestro enemigo común. Hace cien años, la clase dominante yanqui se lanzó a la sangrienta conquista de Filipinas como elemento central de su ascenso al escenario global como potencia imperialista.

El pueblo filipino tiene una larga y orgullosa historia de resistencia contra los opresores. La lucha dio un gran paso adelante con el reestablecimiento del PCF y el NEP en 1968-69. Hoy, la guerra popular en Filipinas es una fuente de fuerza e inspiración para los revolucionarios de todo el mundo. Esto tiene una importancia especial para los que vivimos en Estados Unidos, la principal potencia imperialista que oprime a Filipinas. Tenemos una responsabilidad internacionalista especial de movilizar apoyo para la revolución filipina y otras guerras populares maoístas. Además, el PCR,EU está aplicando el marxismo-leninismo-maoísmo a las condiciones concretas de este país, y se está preparando para el día cuando pueda lanzar la guerra popular aquí y tumbar este monstruo. Nuestro partido está firmemente comprometido a construir un movimiento revolucionario en las "entrañas de la bestia", como parte de la lucha del proletariado internacional por un mundo comunista.

El PCR,EU saluda al Partido Comunista de Filipinas y al Nuevo Ejército Popular con motivo del 30 aniversario de su reestablecimiento. Recordamos y rendimos homenaje a los mártires revolucionarios, quienes dieron la vida por el pueblo y lucharon por la causa de la liberación. Estamos hombro a hombro con ustedes en la lucha para conquistar nuevas victorias en el movimiento de rectificación y en la guerra popular.

Juntos, intensifiquemos nuestros esfuerzos por plasmar en realidad nuestros sueños revolucionarios.


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