¡Palestine vivirá!

Obrero Revolucionario #1147, 21 de abril, 2002, posted at http://rwor.org

Metal retorcido, manzanas enteras en escombros, casas allanadas, familias palestinas expulsadas de su casa. Tanques destrozando carreteras, tuberías y cables de electricidad. Soldados israelíes por todas partes, arrogantes fuerzas de ocupación desbocadas, arrestando a miles, matando a cientos, humillando, golpeando: ocupación.

Ante esta grave amenaza a la existencia del pueblo palestino, su respuesta es: "No nos dejaremos conquistar". Su causa es causa común de los oprimidos de todo el mundo.

Por más que el ejército israelí procure tapar las atrocidades y por más que la prensa estadounidense tergiverse los hechos, la esencia de este conflicto está a la vista de todo el mundo.

Vemos una potencia militar armada hasta los dientes, con el respaldo económico y diplomático de Estados Unidos, contra un pueblo pobre, mal armado, bajo una ocupación brutal.

Vemos las fuerzas de ocupación: un ejército que actúa sin justicia, que desata castigos colectivos contra toda la población, emperrado en aplastar toda resistencia.

Vemos al pueblo ocupado: expulsado de su tierra por el estado sionista de Israel hace más de 50 años; desterrado a Jordania, atacado por el gobierno jordano en 1970, con respaldo de Israel y Estados Unidos; expulsado al Líbano, atacado por el ejército israelí en 1982; en resistencia contra la ocupación de Gaza y Cisjordania desde 1967: no deja que lo nieguen, opone resistencia, reafirma su causa.

El gobierno israelí proclama que está en una misión de autodefensa provocada por los bombardeos suicidas. Pero la realidad de la situación --para todos los que la quieran ver-- es que las fuerzas armadas de Israel están en una misión de destrucción de la sociedad palestina en Cisjordania, una misión para decirle al mundo que el destino de los palestinos está en las manos de Israel y de Estados Unidos.

En medio de todo esto, nos dicen que los mayores opresores del planeta son los únicos que pueden llevar paz a Palestina. Pero la actual "misión de paz" de Estados Unidos no tiene nada que ver con justicia para los palestinos; con las protestas que están estallando en las capitales árabes, la crisis palestina puede trastornar los planes de atacar a Irak.

Estados Unidos acusa arrogantemente a los palestinos de "perder una oportunidad" de paz, pero los acuerdos de paz que fraguó Washington confinan a los palestinos en ghettos, pedacitos separados del suelo palestino, completamente a merced de Israel, con Yaser Arafat como guardián.

Pero hasta eso es demasiado para unos sectores de la clase dominante de Israel. En septiembre del año 2000, Ariel Sharon se presentó con mil soldados a la mezquita Haram al-Sharif, en Jerusalén oriental, la capital histórica de Palestina, en un despliegue de rechazo público al proceso de paz.

Tras siete años de esperanzas cruelmente pisoteadas, esa provocación suscitó la resistencia de los palestinos. El ejército israelí les disparó a los lanzapiedras, y atacó las zonas palestinas con tanques y helicópteros de combate, vez tras vez, tras vez. Ha bombardeado campos de refugiados, destruido la estructura de la Autoridad Palestina, apresado al presidente palestino y sometido a todo el pueblo a un reino de terror.

Toda una generación ha visto a las tropas de ocupación matar a muchachos, tumbar casas y arrasar huertos como represalia. Vivir bajo la ocupación ha atizado una firme determinación de luchar contra ella. Ante la ausencia de una estrategia revolucionaria para confrontar y derrotar la ocupación, muchos chavos han recurrido a misiones suicidas.

Las acciones de las fuerzas armadas de Israel han hecho recapacitar a mucha gente, pero todos los que se oponen a la ocupación tienen que examinar la situación más a fondo.

¨Por qué la "seguridad" de Israel se basa en subyugar al pueblo palestino? Porque la fundación del estado israelí --fundado como un estado sionista exclusivo para representar los intereses del imperialismo occidental en la región-- se basó en la expulsión del pueblo palestino árabe de su tierra. El estado de Israel lleva 50 años atropellando a los palestinos y a los pueblos de la región, pero no tiene paz... porque donde hay opresión habrá resistencia.

La brutal ocupación de Cisjordania pone escuetamente en claro que en Palestina no puede haber paz ni justicia hasta que la situación cambie dramáticamente, hasta que se derrote la destructiva máquina de guerra israelí y se forje una nueva sociedad por medio de la lucha revolucionaria. Aunque parezca un sueño, por medio de la lucha revolucionaria se puede crear una Palestina roja, un estado democrático laico en que todas las masas de Palestina tengan igualdad de derechos y ejerzan juntas el poder.

Puede que no parezca realista, pero los jóvenes palestinos, dispuestos a dar la vida, merecen una estrategia revolucionaria y una lucha de liberación de veras. Y la realidad de la "solución de dos estados" --en que uno es el estado sionista israelí enganchado con los mayores opresores del planeta y el otro estado es un ghetto palestino-- se ve en la muerte y destrucción de Cisjordania.

En medio de la indignación por los horrores que perpetra el ejército israelí, soñamos con un futuro diferente.


Este artículo se puede encontrar en español e inglés en La Neta del Obrero Revolucionario en:
rwor.org
Cartas: Box 3486, Merchandise Mart, Chicago, IL 60654
Teléfono: 773-227-4066 Fax: 773-227-4497
(Por ahora el OR/RW Online no se comunica por correo electrónico.)