El miércoles 20 de marzo, varios grupos estudiantiles pro Palestina y otros que acudieron desde muchas partes de California a la Universidad de California-Los Ángeles (UCLA), protestaron contra la reunión de la Junta de Regentes de la Universidad de California (UC). La Junta tenía programado discutir una propuesta (punto “J1”) de una nueva política que tiene por objeto censurar a la expresión pro Palestina y anti-genocidio. La política J1 prohibiría la publicación de llamadas declaraciones “discrecionales” (opcionales) “políticas” o “controvertidas” en las páginas de inicio de las facultades — por ejemplo, esta declaración de Docentes por la Justicia en Palestina, publicada actualmente en la página de inicio de la facultad de Estudios Críticos Raciales y Étnicos de la UC Santa Cruz.

Por si acaso hubiera alguna duda sobre quiénes y qué fue el blanco de esta política, el autor de J1, el regente Jay Sures, calificó de “retórica incendiaria y desconectada” el uso de la palabra “genocidio” por parte del Consejo de Docentes de Estudios Étnicos de la UC para describir el asalto israelí contra Gaza. 

Piénsenlo: Estados Unidos está apoyando a Israel en su masacre de más de 32 mil palestinos, casi la mitad de ellos niños, su reducción a escombros de Gaza, su imposición de la hambruna a la población entera y su masacre de ellos cuando tratan de conseguir alimentos — y ¡se prohíbe a los académicos en las universidades (que supuestamente existen para estudiar la realidad y buscar la verdad) decir la verdad al respecto! En protesta, Docentes por la Justicia en Palestina de la UCLA publicó esta declaración importante en el Daily Bruin.

Esta resolución de la Junta de Regentes de la UC es parte de un patrón más amplio de represión de voces pro Palestina en el ambiente académico por todo Estados Unidos, lo que viola con descaro los supuestos derechos a la “libertad de expresión” y la “libertad académica”. La Universidad de Columbia prohibió a los grupos Estudiantes por la Justicia en Palestina y la Voz Judía por la Paz. A estudiantes pro Palestina les han publicado su información personal (doxeado) y los han puesto en una lista negra. A las presidentas de Harvard y U Penn las obligaron a renunciar a sus puestos ¡por no reprimir suficientemente duro a los universitarios pro Palestina!

Como Bob Avakian señaló en Revolución #17:

¿Por qué ocurre esto? Debido a que están en juego los intereses fundamentales del capitalismo-imperialismo estadounidense. Debido a que Israel desempeña un “papel especial” de bastión de apoyo fuertemente armado para el imperialismo estadounidense en una parte estratégicamente importante del mundo (el “Medio Oriente”). Además, Israel ha constituido una fuerza clave en la perpetración de atrocidades, algo que ha contribuido a mantener el dominio opresivo del imperialismo estadounidense en muchas otras partes del mundo.

Además, esta represión está ocurriendo debido a que los representantes de la clase dominante estadounidense reconocen claramente que si los jóvenes, especialmente en las universidades de “élite”, empezaran a cuestionar con seriedad y a actuar en contra de lo que este sistema está haciendo —si el sistema “perdiera la lealtad” de grandes números de estos estudiantes—, eso podría ser un factor importante en la creación de una verdadera crisis para el sistema en su conjunto, como lo que ocurrió en los años 1960: una crisis, ahora más que nunca, que en realidad este sistema no puede darse el lujo de permitir, en un momento en que profundas divisiones ya están desgarrando al país entero, con choques agudos ahí mero entre las fuerzas gobernantes. Por lo tanto, al mismo tiempo que los poderes gobernantes en Estados Unidos están fuertemente divididos, están firmemente unidos en su determinación de castigar e intimidar especialmente a los estudiantes de las universidades de élite los que se han pasado al frente para protestar contra la masacre genocida de los palestinos. La clase dominante desesperadamente quiere impedir que una oposición a sus intereses fundamentales se extienda y active a masas de personas, de todas partes de la sociedad.

Todo esto revela, más “manifiestamente” que en “situaciones normales”, la dictadura concreta detrás del cascarón externo de la “democracia” en Estados Unidos — y arroja una luz sobre la debilidad estratégica de este sistema, cuando sí llegue a perder la lealtad de importantes sectores de la población y esto conlleve el potencial de propagarse a todas partes de la sociedad, incluso entre las instituciones dominantes de este sistema.

En este contexto, resultó muy importante el brote significativo de protesta de parte de estudiantes pro Palestina (¡en plena semana de exámenes finales!) contra esta nueva política represiva, y la participación de los revcom.

La noche antes de la protesta, docenas de estudiantes ocuparon el centro de conferencias donde los Regentes se sesionaban, antes de que una fuerza policial masiva los brutalizara y los expulsara. En la página Instagram de UCLA Divest (Desinvertir UCLA) escribieron:

Cuando UC Divest entró en el hotel, guardias de seguridad particular y seguridad universitaria se apuraron para sacarnos de manera forzosa y violenta. Las cámaras grabaron cómo estrangularon, golpearon, empujaron y rasguñaron a las personas, las aplastaron entre las puertas, y más. Dentro de unos minutos de que entramos al hotel, autos patrulleros inundaron la Luskin turnaround [la callecita en frente del centro de conferencias]. UC Divest permaneció en el espacio durante unos 30 minutos antes de que la policía en equipo antimotines pidieran una orden de dispersión para sacarnos del espacio.

De ahí UC Divest estableció un campamento de tiendas de campaña justo afuera y pasaron la noche ahí. Al día siguiente asistieron a la protesta unos 80-90 estudiantes, principalmente capítulos de Estudiantes por la Justicia en Palestina y grupos por la desinversión de UCLA, UC Irvine, UC Riverside y UC Santa Barbara. Después de un mitin inicial muy corto marchamos a la entrada de la reunión de los Regentes, para una sesión pública. Una vez que los Regentes empezaron a hablar de la propuesta J1, los manifestantes empezaron a interrumpir, incluidos un par de los revcom. Muy pronto, los agentes de seguridad dieron una orden de dispersión y expulsaron a todos. De ahí la Junta de Regentes anunció su aplazamiento del voto sobre J1 hasta el mayo (y quizá vaya a diluir el carácter represivo de esta política). 

Los estudiantes continuaron su campamento en la UCLA una noche más y protestaron al día siguiente en la reunión de los Regentes, demandando que el sistema UC desinvirtiera de las corporaciones que fabrican armas para su venta a Israel. 

En medio de todo esto, los revcom se sumaron a la resistencia, pero también lucharon con los estudiantes sobre su entendimiento del problema fundamental y la solución fundamental. Algunos estudiantes eran muy nuevos a la vida política y simplemente querían hacer algo para poner alto a este genocidio. De hecho, no habían pensado mucho sobre por qué hay tanta represión contra los estudiantes pro Palestina y por qué Biden sigue apoyando a Israel aunque posiblemente le cueste una victoria electoral. Algunos estudiantes piensan que una razón central de todo lo que está pasando es que los fabricantes de armas sacan ganancias de este genocidio y se compran a las administraciones universitarias y a los políticos. Algunos estudiantes hablaron del “imperialismo” y la “revolución”, pero en realidad no entendían a fondo el capitalismo-imperialismo como un sistema, y tendían a equivaler la revolución con la construcción de un movimiento. Algunos estudiantes estaban abiertos a los revcom y querían conversar, mientras otros sentían muy incómodos y querían limitar las cosas al estrecho horizonte de la lucha actual en el campus. En todo esto, era importante que los revcom estábamos ahí sumándonos a la lucha y aprendiendo de lo que las personas decían y contendiendo sobre el problema más a fondo y la solución revolucionaria a todo esto.

Se necesita con urgencia: ¡mucho más resistencia así! ¡Mucho más discusión y debate sobre por qué esto está pasando y la solución revolucionaria!